Los 12 miembros del jurado en el juicio contra Nikolas Cruz, asesino confeso de la masacre de Parkland, anunciaron este jueves que recomiendan su condena a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. El jurado del condado de Broward (Florida) considera que Nikolas Cruz debe pasar el resto de su vida en prisión, y no ser condenado a pena de muerte, por la masacre de la escuela en 2018.
Cruz, de 24 años, se declaró culpable el año pasado de los asesinatos de 14 estudiantes y tres miembros del personal de la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland (Florida) el 14 de febrero de 2018, una fecha, Día de San Valentín, que eligió según su testimonio para que la escuela no volviera a celebrar esa festividad. El acusado tenía entonces 19 años.
El asesino disparó numerosas ráfagas con un rifle semiautomático estilo AR-15 por los pasillos y dentro de las aulas de la escuela durante casi 10 minutos, volviendo tras sus pasos para ejecutar a los heridos que yacían en el suelo. Nikolas Cruz dijo que compró el rifle un año antes del tiroteo y que empezó a planearlo seriamente con unos siete meses de antelación. Se enfrenta, además, a otros 17 cargos de intento de asesinato.
Problemas mentales
La defensa de Nikolas Cruz quiso mostrar durante el juicio los problemas mentales del encausado. El doctor Paul Connor, neurólogo que examinó a Cruz en la cárcel, atribuyó estos problemas a las adicciones de su madre desde que estaba en el vientre, algo conocido como trastornos del espectro alcohólico mental.
Durante el juicio, la defensa de Cruz agumentó que sus acciones fueron producto de estos supuestos problemas mentales para evitar su condena a muerte. El jurado dictaminó que Nikolas Cruz merece la cadena perpetua y no la pena capital.
