Joe Biden criticó la legislación propuesta por el senador Lindsey Graham para restringir el aborto en todo el país después de las primeras 15 semanas de gestación. Durante una recaudación de fondos del Comité Nacional Demócrata, el presidente calificó el proyecto de ley de extremo y afirmó que la Iglesia católica es menos estricta en el tema que los republicanos del Congreso. No obstante, la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) respaldó el proyecto de ley de Graham y defendió el derecho a la vida desde el momento de la gestación.
"La Iglesia católica sigue siendo clara y consistente al afirmar que la verdadera justicia exige el derecho a la vida, el derecho humano y civil más básico, para cada niño, desde la concepción en adelante", escribió el arzobispo William E. Lori, presidente del Comité de Actividades Pro-Vida de la USCCB, en una carta de agradecimiento a Graham por su proyecto de ley.
Biden insiste
A pesar de la clara posición de la Iglesia con respecto al aborto, Joe Biden afirmó que la Iglesia católica permite excepciones en caso de violación e incesto. "Mi punto genérico, y resulta que soy un católico romano practicante, es que mi iglesia ni siquiera hace ese argumento ahora", añadió.
El proyecto de ley de Graham tiene como obstáculo un Senado controlado por los demócratas. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, calificó la proposición de "salvajemente fuera de sintonía con lo que creen los estadounidenses".
Tras ser revocada Roe vs. Wade el pasado julio, la polémica sobre el aborto, lejos de remitir, parece agudizarse.
