El hombre que demandó a Gwyneth Paltrow dice que nunca lo "habían golpeado tan fuerte"

El optometrista dijo que escuchó un grito espeluznante" como si alguien estuviera fuera de control" justo antes de ser golpeado.

Este lunes el hombre que demandó a la famosa actriz de Hollywood Gwyneth Paltrow se subió al estrado luego de que sus abogados aseguraran que surgió una nueva prueba sobre el accidente de esquí que supuestamente le causó grave lesiones físicas.

Terry Sanderson, un optometrista jubilado de 76 años aseguró que él estaba esquiando “tranquilamente” cuando escuchó un grito que calificó de “espeluznante” poco antes de caer.

"Solo recuerdo que todo iba muy bien y luego escuché algo que nunca había escuchado en una estación de esquí y fue un grito espeluznante (…) Era como si alguien estuviera fuera de control y fuera a chocar contra un árbol y morir. Y eso es lo que supe hasta que me golpearon”, aseveró.

El optometrista dijo que recibió un golpe muy fuerte en la espalda, “justo en los omóplatos”. “Nunca me habían golpeado tan fuerte”, dijo.

Una nueva prueba

El juez Kent Holmberg afirmó que detectives en línea encontraron un enlace que contiene una conversación entre los miembros del grupo de esquí de Sanderson y agregó que ese contenido se incluirá como evidencia.

Craig Ramon, otro esquiador que dice ser el único testigo presencial del accidente, dijo en los mensajes que Terry quedó inconsciente tras el accidente. “¡Fue un mal golpe en la cabeza! Vi el golpe. Terry no sabía ni cómo se llamaba”, se lee en el intercambio de mensajes.

La versión de Gwyneth Paltrow

La semana pasada fue la artista la que se subió al estrado y contó que fue ella la que cayó luego de que el hombre la golpeara por la espalda.

Según Paltrow, en el momento del accidente incluso llegó a pensar que estaba siendo agredida sexualmente debido a la forma en la que sus esquís “se interpusieron” entre los suyos obligándola a separar sus piernas. Además de esto, la artista mencionó que sintió el cuerpo del optometrista presionando el suyo por la espalda hasta que ambos cayeron al suelo.

“Estaba confundida al principio y no sabía exactamente qué estaba pasando. Es algo muy extraño que suceda en una pista de esquí. Me congelé, y diría que me enojé mucho un par de segundos después”, dijo.