Trump promete que designará a los cárteles mexicanos como grupos terroristas y lanzará una gran campaña antidrogas
Los comentarios del presidente electo se producen semanas después de que amenazara al Gobierno mexicano con aranceles en el caso de que no intensifique su lucha contra el tráfico de estupefacientes.
El presidente electo Donald Trump volvió a prometer que designará a los cárteles de droga mexicanos como organizaciones terroristas una vez asuma el cargo, el próximo 20 de enero de 2025. También habló de que su Administración hará una gran campaña publicitaria antidroga en un esfuerzo del Gobierno federal por alejar a los ciudadanos estadounidenses del consumo de estupefacientes.
“Todos los miembros de pandillas extranjeras serán expulsados, y designaré inmediatamente a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras. Lo haremos de inmediato”, afirmó Trump durante una conferencia del grupo conservador Turning Point en Phoenix (Arizona).
“Y desataremos todo el poder de las fuerzas del orden federales, ICE, la Patrulla Fronteriza”, añadió el presidente electo antes de ser ovacionado por el público.
Luego habló de la campaña antidroga, que parece basarse en parte a la iniciativa ‘Just Say No’, liderada por la ex primera dama republicana Nancy Reagan en la década de los ochenta para intentar alejar a los jóvenes estadounidenses del consumo de drogas.
“Vamos a publicitar lo malas que son las drogas para ti. Arruinan tu aspecto, arruinan tu cara, arruinan tu piel, arruinan tus dientes”, dijo Trump, antes de añadir que se pondrá “mucho dinero” para la campaña pero que, al mismo tiempo, será una “cantidad muy pequeña de dinero, relativamente”.
La promesa de Trump de designar a los cárteles mexicanos como grupos terroristas no es nueva y, de hecho, en 2019 el presidente republicano la echó para atrás luego de que el expresidente mexicano Andrés Manuel López Obrador le pidiera a su entonces homólogo estadounidense que no procediera con las designaciones a cambio de trabajar más fuertemente en la lucha contra el narcotráfico.
Trump ha adoptado desde la campaña presidencial un duro discurso antidroga, haciéndose eco constantemente la crisis del fentanilo y utilizando los aranceles como un mecanismo de presión contra China, Canadá y México para que ayuden a Estados Unidos a frenar la fabricación y el tráfico de este poderoso opioide que se ha convertido en una crisis de salud pública en sí mismo para el país.
De hecho, diversos estudios estiman que este año morirán entre 50.000 y 60.000 estadounidenses por sobredosis de opiáceos sintéticos, la mayoría por el consumo particular del poderoso fentanilo o drogas relacionadas.