Algunos de los sindicatos más poderosos del país se resisten a respaldar a Kamala Harris
La vicepresidente ya habría conseguido el apoyo de suficientes delegados comprometidos como para asegurarse la nominación en la Convención Nacional Demócrata, la cual se celebrará entre el 19 y el 23 de agosto en Chicago.
Joe Biden renunció a su candidatura presidencial el pasado domingo 21 de julio y respaldó a Kamala Harris para encabezar el ticket demócrata en noviembre. Apenas horas después, decenas de legisladores y gobernadores se encolumnaron detrás de la actual vicepresidente, como así también importantes sindicatos. Sin embargo, algunos gremios todavía no terminan de comprar a la californiana, quien en 2019 fue el miembro del Senado más progresista.
Electoralmente hablando, los demócratas se han beneficiado en los últimos años del apoyo de los sindicatos. Esto es cierto particularmente en estados como Nevada, Michigan, Pennsylvania, Minnesota y Ohio, importantes a la hora de hacer cuentas para llegar a los 270 electores en noviembre.
¿Cuáles son los beneficios de recibir el respaldo de un sindicato? Además de la dicha ventaja electoral en algunos rincones del país, lo fundamental es el dinero y del poder organizativo que aportan los gremios.
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"Es necesario contar con el respaldo del sindicato para poder obtener dinero. Por lo tanto, el primero, el respaldo, es una condición para obtener el segundo", explicó al respecto Marick Masters, profesor de administración de empresas en la Universidad Estatal de Wayne, en diálogo con Scripp News.
Kamala Harris no convence a algunos de los sindicatos más grandes del país
Desde que parte del liderazgo del partido la impulsara como candidata, Harris recibió el respaldo de más de media docena de organizaciones laborales nacionales, siendo estos los más destacados: Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (1,9 millones de afiliados), la Federación Estadounidense de Maestros (1,7) y los Trabajadores de las Comunicaciones de Estados Unidos (700.000).
Quizás el respaldo más importante hasta ahora llegó de la mano de AFL-CIO, el cual tiene 12 millones de afiliados en todo el país. “Con Kamala Harris en la Casa Blanca, juntos continuaremos construyendo sobre el poderoso legado de la administración Biden-Harris para crear buenos empleos sindicales, hacer crecer el movimiento laboral y hacer que nuestra economía funcione para todos nosotros”, expresó dijo la presidenta del sindicato, Liz Shuler, a través de un comunicado.
Sin embargo, Harris no logra convencer a la Hermandad Internacional de Camioneros, el Sindicato Unido de Trabajadores Automotrices (UAW) y el sindicato de docentes de la Asociación Nacional de Educación, algunos de los sindicatos con más presencia en los citados estados clave.
En cuanto al primero, el presidente de los 'Temasters', Sean O'Brien, habló en la Convención Nacional Republicana de Milwaukee, convirtiéndose en el primer líder de este sindicato en hacerlo en más de 100 años.
Si bien su discurso no fue el más aplaudido por los delegados republicanos, O'Brien destacó al ticket Trump- Vance durante su intervención.