El rabino Azman quiere traer a Tucker Carlson a Ucrania
El rabino buscará abordar a Carlson durante una gira americana que ya ha empezado y en la que ya se ha reunido con Steve Witkoff.

El rabino ucraniano Moshe Azman
Después de convertir a la causa ucraniana al ‘pastor de Trump’, el rabino Moshe Azman se ha marcado un objetivo particularmente ambicioso: conseguir que Tucker Carlson viaje a Kiev y vea por sí mismo la trágica realidad creada por el país al que apoya en esta guerra.
“Nunca me han gustado las cosas fáciles”, dice a VOZ este rabino nacido en Rusia con excelentes relaciones con el mundo MAGA que presume de amistad con Rudy Giuliani.
“Yo no tengo color político. Ucrania e Israel son mi única ideología, y Giuliani es un gran amigo de Israel”, dice Azman, que tiene como prioridad traer a Kiev a cuantos más escépticos con la causa ucraniana con influencia sobre la administración Trump y considera inútil seguir gastando esfuerzos en invitar a los que ya están convencidos.
El rabino buscará abordar a Carlson durante una gira americana que ya ha empezado y en la que ya se ha reunido con Steve Witkoff, el representante especial de Trump para Irán y Rusia. Witkoff ha mostrado gran entusiasmo por el presidente ruso Vladímir Putin y por sus tesis sobre la guerra en Ucrania. Esn este sentido cumple perfectamente las características de los objetivos del rabino.
La diplomacia tête-à-tête no es el único método de Azman para buscar nuevos adeptos con poder a la causa ucraniana.
Días antes de nuestra entrevista el rabino publicó en X y YouTube un sentido llamamiento a Donald Trump para que actúe con la determinación que de él se espera contra Putin.
“Eres el número uno, el mundo te está mirando. A cada paso, a cada cosa que haces. No dejes que se difumine la línea entre el bien y el mal. La luz siempre emergerá, la oscuridad no ganará,” dicen los primeros versos.
Regímenes como el de Irán siguen con atención las reacciones de Trump a las acciones de Putin, que sigue bombardeando Kiev y otras ciudades ucranianas pese a las exigencias de EEUU para que declare un alto el fuego. Si Rusia tiene barra libre los ayatolás y otros agentes del caos no dudarán en servirse también a ellos mismos, advierte el rabino, que después del 7 de octubre ha viajado repetidamente a Israel para apoyar a los soldados y a las víctimas civiles de la guerra que inició Hamás.
La canción -con su videoclip de cuidada producción y excelente factura- suma ya cerca de 400.000 visualizaciones en la red de Elon Musk y toca con épica, gracia, economía del lenguaje y gran belleza las cuestiones prácticas y morales fundamentales que deberían informar la posición de Trump sobre esta guerra.
“Ellos (los rusos) siempre mienten, siempre esconden el cuchillo. El trono del zar está hecho de odio y de miedo. No quieren la paz, sólo quieren sangre y fuego. Es tiempo de aplastar al imperio del mal.”
Azman nació en Leningrado (hoy San Petersburgo) en 1966. Conoce bien la Unión Soviética y las diferencias entre Rusia y Ucrania. “Si no puede hacerle una entrevista a Zelenski me puede preguntar a mí. Yo se lo puedo explicar todo”, dice el rabino sobre una posible visita de Tucker Carlson, a quien el presidente ucraniano no quiso recibir por su marcada posición antiucraniana y pro-Putin.
Igual que Azman debería ser nombrado por el bien de su país adoptivo embajador de Ucrania en Washington, quienes le han escrito la letra y le han producido el vídeo se merecen, si no la tienen ya, una carrera exitosa en la industria de la música.