Texas ejecuta por inyección letal a Iván Cantú
La ejecución del asesino en serie Thomas Creech, prevista también para este miércoles en Idaho, tuvo que ser suspendida tras fallar repetidas veces en la ejecución.
Iván Cantú, el preso latino de 50 años condenado a muerte en 2001 por los asesinatos de su primo, James Mosqueda, y la prometida de este, Amy Kitchen, fue finalmente ejecutado en la noche del miércoles en Texas.
El reo de origen hispano murió en la prisión de Huntsville y en sus últimas palabras siguió insistiendo en su inocencia, tal y como hizo en las últimas dos décadas levantando a su alrededor un movimiento encabezado por rostros populares como Jane Fonda, Martin Sheen o Kim Kardashian pidiendo la suspensión de la pena capital.
Según recuerda AFP, las autoridades estatales negaron los pedidos de clemencia pese a las evidencias que fueron apareciendo para una posible nueva investigación del caso. La entonces pareja de Iván Cantú, Amy Boettcher, actualmente fallecida, testificó que él había admitido su culpa y que la llevó a la casa de Mosqueda para mostrarle los cuerpos y buscar drogas. El hermano de Boettcher también lo acusó, pero luego se retractó. Entre las pruebas en el juicio, se mostró un pantalón con sangre de las víctimas que fue encontrado en el bote de basura de la cocina de Cantú. Sus abogados sostienen que Boettcher mintió y que otra persona colocó allí la prenda, que no era del acusado.
Ejecución frustrada en Idaho
Por su parte, la ejecución en Idaho del asesino en serie convicto Thomas Creech, de 73 años, fue suspendida el miércoles después de que un equipo médico tratara repetidas veces y sin éxito de inyectarle la sustancia letal.
Creech estuvo atado a una mesa en la cámara de ejecución durante una hora mientras intentaron establecer una vía intravenosa para administrarle las drogas que acabarían con su vida, dijeron funcionarios de la prisión y testigos en declaraciones que recoge AFP.
El director del Departamento Correccional de Idaho (IDOC), Josh Tewalt, dijo que la ejecución fue cancelada después del fracaso de ocho intentos de colocar una vía en los brazos y piernas de Creech.
Creech, que ha estado en el corredor de la muerte durante más de 40 años y que iba a ser la primera persona ejecutada en Idaho en más de una década, fue condenado a muerte por asesinar a su compañero de celda en 1981. Ya purgaba condena por otros cinco asesinatos, aunque afirmó haber cometido decenas más.