Un tribunal federal de apelaciones reestablece parcialmente el control de Trump sobre la Guardia Nacional en Illinois, pero impide su despliegue
La decisión de este sábado fue tomada por la jueza de distrito April Perry, quien el pasado jueves había bloqueado el uso de la Guardia Nacional por parte del Gobierno.

La Guardia Nacional estadounidense.
El Tribunal de Apelaciones del Séptimo Circuito restableció este sábado de forma parcial el control del presidente Donald Trump sobre la Guardia Nacional tanto en la ciudad de Chicago como en Illinois, pero le impidió desplegar a la Guardia Nacional en dicho estado. De esta forma, el fallo del tribunal federal determinó que, si bien se concedió parcialmente la solicitud de suspensión administrativa presentada por la Administración Trump —lo que implica que el mandatario republicano cuenta con la autorización para federalizar la Guardia Nacional en Illinois—, se denegó la solicitud de esta misma para ordenar el despliegue de las tropas. Sin embargo, el fallo también detalló que estas no tendrán que regresar a sus estados de origen, salvo que el tribunal ordene lo contrario.
La decisión de este sábado fue tomada por la jueza de distrito April Perry, quien el pasado jueves había bloqueado el uso de la Guardia Nacional por parte del Gobierno. Su decisión de este sábado refleja el fallo emitido el pasado miércoles por la jueza de distrito Karin Immergut en relación con las medidas de Trump con respecto a la Guardia Nacional en la ciudad de Portland, Oregón. “El efecto de conceder una suspensión administrativa preserva el statu quo, en el cual los miembros de la Guardia Nacional han sido federalizados pero no desplegados”, escribió un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito en una breve orden.
Perry, quien fue designada por el expresidente demócrata Joe Biden durante su administración, también había concedido previamente la solicitud de Illinois y de los funcionarios de Chicago para emitir formalmente una orden de restricción temporal, impidiendo de esta forma que Trump tomara el control de la Guardia Nacional y pudiera enviarlas a lo largo y ancho del estado, luego de que varias de sus unidades fueran ordenadas a patrullar en los alrededores de Chicago.
Los principales demócratas de Illinois habían celebrado la decisión tomada por Perry este jueves
Por su parte, el gobernador demócrata de Illinois, JB Pritzker, afirmó en un comunicado que la decisión de Perry del pasado jueves era una muestra clara de que la administración no está por encima de la ley, y añadió que la Guardia Nacional no tiene cabida en las ciudades del país. “Donald Trump no es un rey, y su administración no está por encima de la ley. Hoy, el tribunal confirmó lo que todos sabemos: no hay evidencia creíble de una rebelión en el estado de Illinois. Y no hay lugar para la Guardia Nacional en las calles de ciudades estadounidenses como Chicago”, dijo el gobernador.