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Sale a la luz el vídeo que denunciaba los negocios de Planned Parenthood con los restos de bebés abortados por el que Kamala ordenó el registro de la casa de un periodista

Las imágenes, obtenidas hace ocho años con cámara oculta, mostraban material sensible como conversaciones de personal de la multinacional abortista poniendo un precio de $1.500 a un hígado.

Montaje de Kamala durante un mítin e imágenes del vídeo con personal de Planned Parenthood retenido y del registro del domicilio de Daleiden.

Montaje de Kamala durante un mítin e imágenes del vídeo retenido.Cordon Press / Captura de Pantalla Daily Signal / CMP.org

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El sectarismo de Kamala Harris y su desprecio por los derechos fundamentales de los ciudadanos quedaron expuestos por un vídeo. No se trata de una grabación suya, sino de unas imágenes conseguidas por el periodista David Daleiden en la que se mostraba cómo Planned Parenthood hacía negocio con restos de bebés abortados. La entonces fiscal general de California ordenó el registro del domicilio de Daleiden y se incautó del vídeo, que, ocho años después, han visto la luz.

Daleiden, jefe de proyecto para el Centro para el Progreso Médico, una organización sin ánimo de lucro que se dedica al seguimiento e información sobre ética y avances médicos, consiguió material gráfico de conversaciones con personal de la multinacional del aborto gracias a una cámara oculta en 2015. 

Kamala "lideró un encubrimiento de delitos relacionados con abortos tardíos"

En la grabación, los empleados de Planned Parenthood hablan de manera explícita sobre el precio de restos de bebés abortados, por ejemplo, 1.500 dólares por un hígado. La investigación de Daleiden también desveló atrocidades perpetradas sobre niños que nacían vivos para ocultar que se estaban realizando abortos por nacimiento parcial.

El periodista denunció que Kamala, como fiscal general de California en ese momento, "lideró un encubrimiento de delitos relacionados con abortos tardíos" y vulneró sus derechos fundamentales en respuesta al requerimiento de Planned Parenthood para evitar el escándalo y la denuncia por prácticas delictivas. 

Kamala envió 11 agentes armados al domicilio de Daledein 

A pesar de que Daleiden no puede asegurar cuánto del contenido exacto de las grabaciones conocía la hoy candidata demócrata a la Casa Blanca, lo que la actual vicepresidente sí que sabía que el Departamento de Policía de Los Ángeles no aceptó la denuncia de la multinacional sobre la obtención ilícita de las imágenes al considerar que fueron obtenidas en "un lugar público".

"Pero eso no le importó a Kamala Harris . Ella envió 11 agentes armados para allanar mi apartamento de todos modos, y se apoderó de todas las imágenes encubiertas para Planned Parenthood", recuerda el periodista. Años después, un juez estatal falló que "que obviamente [la grabación] fue en público, pero el daño para mí y mi equipo ya estaba hecho".

Kamala se reunio con Planned Parenthood antes de ordenar la redada

Según publica el Daily Signal, Kamala se reunió con directivos de Planned Parenthood antes de lanzar la redada contra Daleiden, según prueban correos electrónicos a los que el medio tuvo acceso. Además, miembros del equipo de la Fiscalía General de California se vieron con personal de la multinacional para preparar el encuentro de los responsables. 

Otro de los aspectos descubiertos en esas cintas es el macabro convenio entre Planned Parenthood y la Universidad de California: La multinacional les vendía "sus fetos abortados 'patentados' a cambio de poseer la propiedad intelectual desarrollada a partir de experimentos con ellos".

Dalendein, que subió una nueva remesa de material recientemente, denunció que "todavía me enfrento a varios de los cargos restantes que Kamala Harris presentó por primera vez en virtud de la nunca antes utilizada ley de escuchas/grabaciones de California. El actual fiscal general, [Robert Bonta] todavía se niega a retirarlos".

Kamala inició con Daledein "un patrón que está continuando hasta el día de hoy"

En conversación con el Daily Signal, el periodista dejó clara su postura sobre el modus operandi de la vicepresidente: "Este es un patrón para [Harris]. Su utilización como arma de los poderes de su oficina, en nombre de sus poderosos patrocinadores de intereses especiales en la industria del aborto, para encubrir sus fechorías y perseguir a las personas que quieren exponerlas, que comenzó en California con mi caso y creo que es un patrón que está continuando hasta el día de hoy."

Por ello, Dalendein apunta que "no es coincidencia en absoluto que veamos esta escalada en la instrumentización de los poderes del gobierno federal en nombre de la criminal industria del aborto y contra los pacíficos manifestantes provida tan pronto como Kamala Harris llega a la Casa Blanca.

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