Kamala Harris, la posible e impopular sustituta de Joe Biden
La salida del presidente propicia que el nombre de la vicepresidenta suene con más fuerza para ser uno de los candidatos que se presenten a la Convención Nacional Demócrata.
Kamala Harris, en una conferencia
Tras hacerse oficial la retirada de Joe Biden de la carrera presidencial, motivada por las dudas en torno a su estado cognitivo y a los insistentes reclamos de varios de sus compañeros de partido, el nombre de Kamala Harris suena con fuerza para ser una de las candidatas que se presente en las internas para luego enfrentarse a Donald Trump en las elecciones de noviembre.
No sería ninguna sorpresa que Harris decidiese dar un paso al frente. De hecho, llegó a reconocer que está preparada para avanzar en una entrevista: "Estoy lista para servir. De eso no hay duda". Aun así, fiel a quien depositó su confianza en ella para designarla como su compañera de fórmula, en ningún momento ha pedido a Biden que se retire. Al menos, públicamente.
El vicepresidente peor valorado de la historia
La vicepresidenta debe tener en consideración que cuenta con un más que importante hándicap antes de que apueste por presentarse como aspirante a la Convención Nacional Demócrata de agosto y entrar en la carrera electoral.
Esa desventaja es que es el vicepresidente peor valorado de las tres últimas décadas. En una encuesta, la gestión de Harris recibió un índice de aprobación más bajo que cualquiera de sus predecesores en ese periodo de tiempo, con un 32%.
A pesar de este catastrófico dato, una gran mayoría de los votantes demócratas (79%) está convencida de que Harris debe ser el reemplazo de Biden. Además, también dispone de un mejor registro cuando se consulta sobre cuál de los dos tendría más posibilidades de derrotar a Trump en noviembre.
Fe ciega del entorno demócrata en Kamala Harris
Sin embargo, parece que desde el Partido Demócrata se hace caso omiso a la opinión pública y únicamente vale lo que se juzga internamente. La campaña del presidente Joe Biden empezó a evaluar hace días la viabilidad de que la vicepresidente Kamala Harris sea la candidata presidencial del Partido Demócrata en caso de que el presidente anunciase su marcha.
Ante esa posibilidad, el entorno del Partido Demócrata también comenzó a mover sus hilos para impulsar a Harris hacia la nominación. EMILY's List, un comité de acción política (PAC) centrado en buscar candidatas que apoyen el derecho al aborto, informó de que desembolsaría decenas de millones de dólares para una hipotética campaña presidencial de Harris.
En su momento, EMILY's List ya le concedió 10 millones de dólares cuando fue designada por Biden como su compañera de fórmula antes de las elecciones de 2020.
Parte de los donantes demócratas también parecen ansiosos por escuchar que Harris se presenta a la Convención Nacional Demócrata. Por ello, ya empezaron a movilizarse, según informó POLITICO.
Incluso Trump cree que será la candidata demócrata
Trump, recién elegido nominado republicano, insinuó en una entrevista, pocos días antes de que se celebrase la Convención Nacional Republicana, que Harris será quien sustituya a Biden.
"Me parece que, desde un punto de vista político, es con quien van. Ni siquiera están hablando de alternativas".
"Creo que es una persona ineficaz. Estaba a cargo de la frontera, nunca ha estado allí, no hizo un buen trabajo, y no ha hecho su trabajo en muchas cosas", añadió Trump.
Hacia una dirección más extremista
La vicepresidenta ha dejado patente su postura radical y ha impulsado ciertas medidas totalmente contrarias a la moderación que algunos demócratas quieren establecer dentro del partido. Por ejemplo, Harris se ha alineado con el ala radical a la hora de hablar sobre la despenalización de la prostitución.
Uno de los objetivos de sus ataques ha sido la Corte Suprema, a la que ha llegado a calificar de "tribunal activista" por decisiones como el fallo contra Roe vs. Wade, habilitando, de este modo, que los estados legislen sobre el aborto en función de su criterio y no del federal.
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