Estimados estudiantes y profesores progresistas, acepten la invitación de Irán
Después de que una institución académica iraní ofreciera becas a los que fueron expulsados por las protestas antisemitas en las universidades, deberían aceptar la generosa oferta para ir a fondo en su lucha contra los sionistas. No obstante, el choque cultural puede ser impactante, por lo que aquí van algunos consejos para que su estadía no culmine en una horca.
Estimados estudiantes y profesores progresistas que han estado causando destrozos en varias universidades, amenazando a los alumnos judíos y exclamando consignas contra Israel y Estados Unidos, ¿cómo están? Espero que se encuentren bien, algo más relajados.
No sé si se enteraron, pero desde Irán les llegó una tentadora invitación. La Universidad de Shiraz anunció que está dispuesta a otorgar becas y empleos a los estudiantes y profesores que hayan sido expulsados por participar en las violentas protestas antisemitas.
Los ayatolás odian tanto a los sionistas como ustedes. Por lo tanto, pueden participar en actividades para repudiar a Israel y a Estados Unidos a diario; pueden pisotear y prender fuego las banderas de ambos países regularmente y exclamar “Muerte a Israel” y “Muerte a Estados Unidos” junto con sus venerados islamistas. Realmente, se van a sentir como en casa. Bueno, más o menos. El choque cultural puede ser impactante, por lo que aquí van algunos consejos para que su estadía no culmine en una horca.
En caso de que acepten la propuesta de la universidad, les recomiendo no abordar siquiera el asunto LGBTQ+ que tanto les gusta promover. Soy un tanto holgazán, por lo que le pregunté a la inteligencia artificial qué le sucedería a un estudiante homosexual en una institución académica iraní. Esto fue lo que respondió: “En Irán, la homosexualidad es ilegal y está sujeta a severas sanciones, incluida la pena de muerte según la ley islámica (sharia). Por lo tanto, un estudiante homosexual en una universidad iraní enfrentaría una situación extremadamente peligrosa y difícil si su orientación sexual fuera descubierta”. En fin, un asunto menor, ya saben. Después de todo, lo importante es unir fuerzas contra los sionistas. ¡Palestina libre!, ¿no?
Respecto del asunto de los pronombres, bueno, no sé cómo podrían modificarlos en persa para que sean inclusivos, pero igualmente les recomiendo no intentarlo. Ya saben, no sé cómo les caería a las autoridades de allí las personas trans y demás. Traten de mantener su comportamiento bien heterosexual y cisgénero, y la vestimenta siempre de acuerdo a su sexo biológico. De lo contrario, en lugar de usar un bello collar, se les obligará a vestir una soga demasiado ajustada alrededor del cuello. Bueno, tal vez valga la pena dejar la vida por la causa palestina.
Otro tema. Por favor, les pido a las mujeres que traten de no teñirse el pelo de colores extraños, de no maquillarse demasiado, de no usar piercings o de vestirse con ropa ajustada o mostrando el ombligo, la espalda o siquiera una parte de un hombro. Nada de piel, ni de pelo, claro, ya saben cómo terminan las muchachas rebeldes allí cuando se les ocurre cometer un crimen como llevar el velo corrido. Por lo tanto, durante el verano les recomiendo utilizar buenos y durables desodorantes. Comprendo que toda su ideología se basa en el feminismo y en la igualdad absoluta entre hombres, mujeres, trans, personas gestantes, cisgénero, etc, pero ya saben, tienen que hacer el esfuerzo por la causa palestina.
En caso de que su lealtad a la causa palestina y antioccidental sea tan fuerte, que incluso tomen la decisión de convertirse al islam, sepan que pueden hacerlo de una manera muy sencilla: sólo deben pronunciar la shahada (testimonio de fe), una oración muy breve para reconocer a Alá como único Dios y a Mahoma como su profeta. El problema no es tanto ingresar al islam, sino abandonarlo, ya que podrían recibir un pequeño castigo: la muerte. Y por si eso fuera poco, los hombres, al haber dejado la religión, se perderían las 72 vírgenes en el Paraíso. Una verdadera lástima, pero nadie dijo que la lucha por la causa palestina fuera sencilla.
Otro asunto a tener en cuenta es el tema de la libertad de expresión. Entiendo que a ustedes les agrada gritar todo tipo de consignas, que en Irán son bienvenidas, salvo que sean contrarias a la ideología de los ayatolás, claro. En caso de no estar de acuerdo con alguna política del Gobierno o de las autoridades de la universidad, resultaría inconveniente expresar su postura en el campus o en la calle o en las redes o en cualquier lado. Ya saben, pueden pasarles cosas como ser torturados y/o condenados a muerte. Es importante mantener la boca bien cerrada, si es que quieren unirse a sus amigos islamistas en la lucha contra el sionismo internacional y el Occidente capitalista. Todo vale por la causa.
Eso sí, sepan que si están pensando en ir a estudiar a Gaza o la Ribera Occidental para vivir de cerca la causa palestina, lamento comunicarles que tendrían que hacer los mismos esfuerzos que en Irán.
Recuerden, estimados estudiantes y profesores progresistas, que deben respetar a rajatabla las normas impuestas en Irán o en los territorios palestinos, ya que sus compañeros en Estados Unidos no moverán ni un dedo en caso de que los ahorquen, los arrojen desde una azotea o los torturen, ya que como ustedes saben, no jews, no news.