El Trump-Kennedy Center pide un millón de dólares por daños y perjuicios a Chuck Redd por su "maniobra política"
El músico de jazz que había dirigido el Christmas Eve Jazz Jam en el centro desde 2006 canceló la actuación de este año después de que el consejo de administración del edificio aprobara añadir el nombre de Trump junto al de John F. Kennedy en la señalización exterior de las instalaciones.

Nuevo cartel en el Centro Trump-Kennedy
La dirección del Kennedy Center de Washington DC reaccionó a la abrupta cancelación de una tradición navideña en el recinto después de que su histórico anfitrión, Chuck Redd, se retirara en protesta por el cambio de nombre del principal centro de artes escénicas del país.
Richard Grenell, designado presidente de la institución por el presidente Trump, criticó duramente la acción de Redd, caracterizándola como una "maniobra política" que perjudicó a la institución sin ánimo de lucro y anunciando planes para pedir un millón de dólares por daños y perjuicios. Grenell calificó la cancelación de "clásica intolerancia", alegando que infligió pérdidas económicas al centro.
El músico de jazz, que venía dirigiendo la Jam de Jazz de Nochebuena desde 2006, canceló la actuación de este año después de que el consejo de administración del edificio aprobara añadir el nombre del presidente Donald J. Trump junto al de John F. Kennedy en la señalización exterior de las instalaciones, bautizando el lugar como Centro Donald J. Trump y John F. Kennedy para las Artes Escénicas.
Redd dijo que tomó la decisión después de ver el cambio de nombre en la página web del centro y luego en el propio edificio.
"Su decisión de retirarse en el último momento -explícitamente en respuesta al reciente cambio de nombre del centro, que honra los extraordinarios esfuerzos del presidente Trump para salvar este tesoro nacional- es intolerancia clásica y una muy costosa para una institución de artes sin ánimo de lucro", escribió Grenell en una carta a Redd.
El concierto, un acontecimiento navideño que se celebra desde hace más de dos décadas, no se realizó el 24 de diciembre como estaba previsto. Por el momento no hay planes para reprogramar el evento, dijo Redd, según The Associated Press.
El cambio de nombre ha provocado intensas reacciones de artistas, legisladores y miembros de la familia Kennedy, así como dudas legales sobre si la junta tiene autoridad para alterar el nombre de un monumento nacional establecido originalmente por el Congreso. Los estatutos federales designan el edificio como Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas, y los críticos argumentan que añadir otro nombre sin la aprobación legislativa podría ser una violación de esa ley.