Llega a Nueva York el primer autobús de ilegales desde Texas

Los alcaldes de Nueva York y Washington quieren ilegales en el país, pero no en sus ciudades. El gobernador Abbott comparte con ellos la experiencia de la frontera sur.

El gobernador Greg Abbott ha anunciado este viernes la llegada del primer grupo de ilegales trasladados en autobús desde Texas hasta la ciudad de Nueva York. Abbott amplía de este modo su respuesta ante lo que califican como "invasión" de inmigrantes ante la política de fronteras abiertas del Gobierno de Biden.

De este modo, una nueva remesa de ilegales está llegando a la Gran Manzana después de que otros grupos hayan sido enviados a Washinton D.C. Abbott toma esta medida ante la inacción de la Administración demócrata ante la crisis migratoria que se vive en la frontera sur y en vista de las políticas progresistas de brazos abiertos de las que hacen gala Nueva York y el DC.

"Debido a la continua negativa del presidente Biden a reconocer la crisis causada por sus políticas de frontera abierta, el Estado de Texas ha tenido que tomar medidas sin precedentes para mantener nuestras comunidades seguras", señala el gobernador en un comunicado cargado de ironía. "Además de Washington, D.C., la ciudad de Nueva York es el destino ideal para estos migrantes, que pueden recibir la abundancia de servicios de la ciudad y la vivienda que el alcalde Eric Adams ha presumido dentro de la ciudad santuario. Espero que cumpla su promesa de recibir a todos los migrantes con los brazos abiertos para que nuestras ciudades fronterizas, desbordadas y abrumadas, puedan encontrar alivio."

Los alcaldes de Nueva York y Washington quieren ilegales en el país, pero no en sus ciudades

Hace unos días, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, afirmó que los inmigrantes se están convirtiendo en una "verdadera carga" para la ciudad. El político demócrata pedía al Gobierno federal fondos para atender la situación. En su comunicación de este viernes, Gregg Abbott le recuerda que, "al ser una de las pocas ciudades con leyes sobre el derecho a la vivienda, la ciudad de Nueva York está obligada a proporcionar alojamiento de emergencia a todas las personas sin hogar".

Algo similar ocurre con Washington. La alcaldesa demócrata Muriel Bowser solicitó hace unos días  que se active la Guardia Nacional para atender a los 4.000 inmigrantes que asegura fueron enviados desde Texas y Arizona en autobús. Bowser señalaba que la situación "es insostenible" porque no cuentan con suficientes recursos para prestar ayuda a las personas que están llegando y denunciaba que la inmigración había alcanzado un "punto de inflexión".

El gobernador de Texas ha invitado a los alcaldes de Nueva York y Washington D.C. a que visiten la frontera de su estado con México para que puedan tener una visión real de la dimensión de la crisis humana que se vive por la oleada de inmigrantes ilegales. El alcalde de Nueva York, Eric Adams, rechazó esta invitación. Ahora podrá tener ocasión de conocer de primera mano la realidad de la inmigración ilegal si se acerca a recibir a los autobuses que llegan desde Texas.