Portland declara el estado de emergencia por la crisis del fentanilo
Dirigentes locales y de Oregon tomaron esta medida debido a la grave situación derivada del consumo y tráfico del letal opioide.
Las autoridades locales y estatales declararon el estado de emergencia en Portland debido a la grave situación que está desencadenando el consumo y la presencia del fentanilo en la ciudad. El alcalde, Ted Wheeler, la presidenta del condado de Multnomah, Jessica Vega Pederson, y la gobernadora de Oregon, Tina Kotek, establecieron la norma -que durará 90 días- para combatir contra esta crisis.
"Nuestro país y nuestro estado nunca han visto una droga tan mortalmente adictiva, y todos están lidiando con la forma de responder. Estamos todos juntos en esto", dijo Kotek en declaraciones recogidas por el medio de comunicación estatal Oregon Public Broadcasting. "La respuesta de emergencia en Portland beneficiará a toda la región, al estado y a las tierras tribales, porque sabemos que una gran parte del fentanilo en Oregón se trafica a través de nuestra principal ciudad".
Los dirigentes impulsarán principalmente dos iniciativas: luchar contra el narcotráfico -se contará con la ayuda de la Oficina de Policía de Portland y con la Policía Estatal de Oregon para rastrear la venta de estupefacientes- y hacer que los drogodependientes usen todos los recursos otorgados por las administraciones -incluyendo su asistencia a los programas para tratar la drogodependencia- para curarse de su adicción.
Wheeler agradeció a las autoridades policiales su colaboración para combatir esta crisis provocada por el fentanilo. "No podemos subestimar el tremendo valor de reunir diariamente en una sala a líderes de diferentes disciplinas que representen una parte diferente de la solución. Me gustaría verlo convertirse en una parte más regular de nuestra comunidad y me gustaría verlo ampliado significativamente en función del éxito actual del programa", afirmó.
Se disparan las muertes por sobredosis
Desde que se despenalizó la posesión de drogas duras en Oregon, el estado sufrió un aumento desproporcionado de las muertes por sobredosis. En comparación con 2019, se multiplicaron por 13, casi siete veces más que la media nacional. Se trata de un aumento de las 280 muertes en 2019 a las 955 en 2023.