La Justicia reabre el caso de pornografía infantil contra Nirvana por su portada de 'Nevermind'

Un tribunal federal de apelaciones reabrió este jueves el juicio contra Nirvana por la portada de su álbum Nevermind. El tribunal no determinó, sin embargo, si la banda y Universal Music -entre otros- eran culpables o no de los cargos por pornografía infantil.

La icónica portada muestra a un bebé desnudo en una piscina, frente a un billete de un dólar enganchado a un anzuelo. Treinta años después del lanzamiento del segundo álbum del grupo, el protagonista de aquella imagen, Spencer Elden, demandó a Nirvana en 2021 por pornografía infantil.

Aunque la corte determinó en primera instancia que había vencido el plazo de prescripción, el Tribunal de Apelación de los Estados Unidos para el Noveno Circuito reabrió la causa argumentando que "cada visionado de pornografía infantil es una repetición del abuso de la víctima". Por tanto, las fechas de las re-publicaciones de Nevermind importan tanto como la de su lanzamiento (1991). Las primeras sí ocurrieron dentro de los 10 años de prescripción -incluyendo una en 2021-.

"Spencer está muy satisfecho con la decisión y espera tener su día en el tribunal", sostuvo el abogado de Elden, Robert Lewis, en declaraciones recogidas por Courthouse News Service. "La decisión es importante para todas las víctimas de pornografía infantil porque reconoce que cada republicación de una imagen sexualizada de un niño daña el bienestar emocional y de esa persona, de forma muy similar a una declaración difamatoria, aunque Nirvana siga republicando la imagen sexualizada de Spencer".

"Este revés procesal no cambia nuestra opinión", sostuvo por su parte Bert Deixler, abogado de la banda, en declaraciones a Reuters. "Defenderemos con vigor este caso sin fundamento y esperamos prevalecer".

Reabierto el caso, el tribunal de distrito deberá decidir si Nirvana es culpable y si Elden recibe los $150,000 que ha exigido como mínimo a cada demandado.