Al menos nueve muertos en un tiroteo en un centro comercial de Allen, al norte de Dallas

Un hombre armado sembró el pánico en la tarde del sábado en el Allen Premium Outlets, en la ciudad de Allen, al norte de Dallas. Comenzó a disparar en el centro comercial alrededor de las 3:30 pm, hora local, cuando se encontraba lleno de clientes y por motivos que todavía se desconocen. Las autoridades de Texas informaron de que nueve personas habían muerto, incluido el autor de los disparos, y otras siete están heridas e internadas en hospitales próximos. De estos, cuatro permanecen estables y los otros tres heridos están muy graves. El jefe del Departamento de Bomberos de Allen, Jonathan Boyd, aclaró que siete personas murieron en el lugar de los hechos y otras dos víctimas de sus heridas al ser trasladadas hacia los centros médicos. Entre las víctimas hay niños.

La matanza pudo haber sido mayor si no hubiera sido porque un agente de servicio se encontraba cerca del lugar atendiendo a otra llamada no relacionada con este tiroteo cuando oyó los disparos a las 3:36 pm. El jefe de Policía, Brian Harvey, declaró en una rueda de prensa celebrada el sábado por la tarde que el policía "se enfrentó al sospechoso y neutralizó la amenaza". Una fuente policial aseguró que el presunto tirador está muerto y que actuó solo. Testigos presenciales aseguran haber oído una treintena de disparos y sesenta rondas de municiones en el suelo. A pesar de todo, varias horas después de que saltaran todas las alarmas podían verse en las redes sociales imágenes de policías locales barriendo la zona en busca de posibles cómplices del tirador abatido.

El gobernador de Texas, Greg Abbot, quiso mostrar sus condolencias a todas las víctimas y a sus familias en un comunicado recogido por los medios: "Nuestros corazones están con la gente de Allen durante esta noche en esta tragedia indescriptible". Una mujer presente en la escena de los hechos con su hija explicó así lo sucedido. "Estábamos fuera de la tienda Converse y escuchamos todos esos estallidos, nos detuvimos y luego, un segundo después, solo 'pop, pop, pop,' (ruidos de disparos) y chispas volando como si estuviera en frente de nosotros". En las imágenes recogidas en las redes sociales pueden verse filas de cientos de clientes abandonando ordenadamente el Allen Premium Outlets, muchos de ellos con los brazos en alto y vigilados por la Policía.

El gobernador Abbot, por su parte, finalizó su intervención asegurando que está "en contacto con el alcalde Fulk y el director de DPS McCraw, así como con otros líderes estatales y locales, y ofrecí todo el apoyo del estado de Texas a los funcionarios locales para garantizar que toda la asistencia y los recursos se implementen rápidamente, incluidos los oficiales de DPS, Texas Guardabosques y recursos de investigación".