La frontera sur: un territorio en lucha contra la droga y la inmigración ilegal

Los agentes de Aduanas y Protección Fronteriza siguen decomisando ingentes cantidades de drogas mortales en la frontera con México. Sólo en dos operaciones los oficiales fronterizos incautaron la semana pasada narcóticos duros que superan los 11 millones de dólares.

Entre las drogas duras que están ingresando los contrabandistas por los cruces fronterizos con México destaca el fentanilo. En las últimas semanas se multiplicaron las voces de alarma sobre la entrada de esa droga en el país. Hace unos días, un grupo de 18 fiscales pidió al presidente Joe Biden considerar al fentanilo como un arma de destrucción masiva. Desde el inicio de la Administración Biden las autoridades habrían confiscado suficiente cantidad de fentanilo contrabandeada a través de la frontera sur para matar a aproximadamente 5 mil millones de personas.

Alarma por el fentanilo

Los 18 fiscales denunciaron que el fentanilo se está cobrando un número récord de vidas en todo el país y sigue fluyendo libremente por la frontera suroeste. Sólo en julio, el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos incautó 2.100 libras de esta sustancia ilegal; suficiente para matar a casi 500 millones de estadounidenses. "Debido a la prevalencia y al bajo coste de producción, existe la preocupación de que las malas personas están convirtiendo al fentanilo en un arma”, señaló este grupo de fiscales tanto demócratas como republicanos.

El gobernador de Texas Greg Abbott emitió hace unas semanas que una orden ejecutiva que designa oficialmente a los cárteles mexicanos de la droga como organizaciones terroristas extranjeras. Abbott instó al presidente Joe Biden a hacer lo mismo para combatir el tráfico de seres humanos en la frontera y el contrabando de fentanilo.

La inmigración ilegal, desbocada

Durante el año fiscal 2022 fueron detenidos más de 2.5 millones de inmigrantes ilegales que intentaban ingresar al país y casi 5 millones de irregulares ya entraron.

Además desde que Joe Biden asumió como presidente –en enero del 2021– hasta la actualidad, las autoridades fronterizas interceptaron a 267.000 menores no acompañados, de acuerdo con las cifras oficiales. En lo que va de año fiscal 2022, 140.186 menores fueron detenidos en los cruces fronterizos.

Los traficantes fronterizos en algunos casos abandonan a los niños en los cruces. Hace unos meses dos bebés, de 18 y cuatro meses, fueron abandonados en el Parque Nacional Organ Pipe Cactus, en Arizona. El primero estaba llorando y el segundo se encontraba boca abajo e inconsciente. Historias como esta abundan en la frontera sur, forman parte de la realidad que le pone cara a una crisis migratoria sin precedentes.

Casi 750 inmigrantes murieron intentando cruzar la frontera sur este año

Durante el año fiscal 2022 (desde octubre de 2021) 748 inmigrantes murieron intentando cruzar la frontera sur, según publicó hace unas semanas CNN. La cifra es superior a las 557 muertes registradas en la frontera durante el año pasado. Este dato podría haberse incrementado ya que la información fue dada antes de que concluyera el año. Además las cifras no registrarían todas las muertes, debido a que otras agencias estatales y locales pueden recuperar cuerpos sin la participación de la Patrulla Fronteriza, por lo que el número de muertes es probablemente mayor.

Con este nuevo récord, la cifra de inmigrantes fallecidos superó el total del año pasado en más de 200 personas. CNN cita fuentes del Departamento de Seguridad Nacional en la obtención de estos datos.

La mayoría de los hispanos cree que Biden debería hacer algo

Un 52 % de los posibles votantes hispanos creen que el gobierno está haciendo "muy poco para reducir los cruces fronterizos ilegales y las estadías excesivas de los visitantes", según reseñó el The Washington Times citando una medición de Rasmussen Reports a la que tuvieron acceso.

Solo el 15% de los votantes cree que el gobierno está haciendo "demasiado" y el 25% dice que los esfuerzos del gobierno son correctos, y el 9% no está seguro. El número de votantes hispanos que piensan que el gobierno está descuidando la frontera es más de tres veces mayor que el número de votantes que piensan que el gobierno está vigilando demasiado.