El hombre que intentó asesinar a Trump voló un dron sobre el lugar del mitin horas antes de disparar

Thomas Matthew Crooks, el hombre que intentó asesinar a Trump y mató a un simpatizante del expresidente en Pensilvania, voló un dron sobre el lugar del tiroteo varias horas antes de disparar, según un reciente reporte del diario The Wall Street Journal.

El medio reportó que Crooks, que fue descrito por sus amigos como inteligente pero solitario, fue a investigar el terreno con anticipación sobrevolando un dron, un hecho que remarca otro fallo notable en la seguridad del evento que terminó con el joven disparando al menos seis veces desde el tejado del edificio American Glass Research, situado a unos 400 pies de donde hablaba Trump.

Con sus disparos, Crooks asesinó a un espectador, hirió de gravedad a dos personas más y dejando a Trump con un rasguño en la oreja con una bala que pasó a escasos centímetros de su cabeza.

El Servicio Secreto respondió a Crooks con francotiradores y lograron darle de baja evitando una tragedia mayor, pero la situación ha generado un aluvión de críticas contra la agencia a medida que surgen nuevos detalles sobre cómo un joven de 20 años sin experiencia militar logró burlar los mecanismos de seguridad.

Hasta el momento, el WSJ reportó que se siguen realizando investigaciones para determinar cómo Crooks pudo subir a una azotea con una clara línea de visión contra Trump y abrir fuego con un rifle AR-15. Asimismo, los fallos en seguridad también revelaron una falla de comunicación grave entre los agentes federales y locales, con la Policía detectando a Crooks más de una hora antes de los disparos.

“El uso del dron fue solo una de las formas en las que, según las autoridades, Crooks planeó su ataque”, reportó el WSJ. “Crooks (…) comenzó a investigar el lugar poco después de que la campaña de Trump anunciara el mitin el 3 de julio, y se registró para el evento el 7 de julio, dijeron las autoridades. Unos días más tarde visitó el recinto ferial para echar un vistazo”.

El 13 de julio Crooks regresó con un par de bombas caseras que, según las autoridades, aparentemente estaban diseñadas para ser activadas a control remoto porque contaban con un receptor similar al que se utiliza para activar fuegos artificiales a distancia.

“Los investigadores encontraron los explosivos rudimentarios en el coche de Crooks, aparcado cerca del recinto, junto con un portabalas, o chaleco, con tres cargadores de 30 balas, un indicio de que podría haber querido causar una matanza mayor”, informó el WSJ.

Los republicanos piden transparencia y rendición de cuentas

La información publicada por el WSJ generó una nueva avalancha de críticas contra el Servicio Secreto y su directora, Kimberly Cheatle, quien enfrenta cada vez más pedidos de dimisión.

“Así que un presunto asesino avanzó en el mitin de Trump con un dron y, sin embargo, ¿el Servicio Secreto no utilizó ni un solo dron para proteger al expresidente? Esto no es solo un fracaso, es una incompetencia peligrosa”, escribió el senador Rick Scott (R-FL). “Necesitamos total transparencia y rendición de cuentas para el pueblo estadounidense ¡YA! Si la culpa es de Cheatle, ¿por qué no ha dimitido?”.

El hijo del presidente Trump, Donald Trump Jr., también criticó al Servicio Secreto explicando que, en una ocasión, intentó volar un dron en Mar-a-Lago pero la agencia no se lo permitió porque su padre estaba en la mansión.

“Solo para subrayar lo loco que es todo esto, una vez me impidieron volar MI PROPIO dron fuera de la playa de Mar-a-Lago por el USSS porque mi padre estaba dentro de la casa... ¡Ahora tenemos uno literalmente explorando su discurso!”, escribió indignado el hijo del expresidente.