El Fondo de Emergencia Climática, detrás del financiamiento de la organización que bloqueó el paso a Burning Man
El CEF, que tiene vínculos con Hollywood, respalda al menos 112 organizaciones que promueven protestas y vandalismo climático. "Apoyamos organizaciones que alteran la normalidad", dice en su página web.
Activistas climáticos fueron noticia luego de que bloquearon el tráfico hacia el evento Burning Man. La situación provocó un estancamiento que se extendió por varios kilómetros en una importante vía de Nevada hasta que un grupo de Rangers Tribales disolvieron, con éxito, la manifestación conduciendo un camión a través del bloqueo, según reseñó Breitbart.
Las manifestaciones climáticas no son nuevas. Desde hace un tiempo, los activistas climáticos han realizado protesta y vandalismo. Muchos han atacado instituciones de Gobierno o museos, generado daños a obras de arte. Por ejemplo, el grupo que estuvo en Nevada ya había realizado varias manifestaciones en organismo y espacios públicos, principalmente en Europa. Extinction Rebellion (conocida como XR), como se llama el grupo de ambientalistas que manifestó en Nevada -según NYPost-, se han pegado a la silla del presidente del Parlamento británico, han bloqueado carreteras muy transitadas y han llevado adelante otras actividades de activismo radical.
Pero, ¿Cómo se financia este tipo de activismo? Desde el año 2019, se fundó el Fondo de Emergencia Climática (CEF), una organización que está financiando silenciosamente a una nueva generación de activistas medioambientales. La organización tiene vínculos directos con Hollywood. CEF fue cofundada por la documentalista Rory Kennedy, hija de Robert F. Kennedy, e inicialmente financiada por la activista y heredera de Getty Oil, Aileen Getty, según Bloomberg.
También forman parte de su junta directiva los productores Adam McKay y Geralyn Dreyfous. De acuerdo con el Fondo de Emergencia Climática, al menos 112 organizaciones son financiadas. El financiamiento tiene como finalidad impulsar las actividades que organizan grupos como Extinction Rebellion y movilizar a los activistas climáticos. En lo que va de 2023, se registran más de 1.000 acciones ejecutadas y al menos 130.000 personas movilizadas. En 2022, otorgó 5,1 millones de dólares en subvenciones a 44 grupos.
Pero, además, CEF asegura que el gradualismo ha fracasado y el activismo funciona. Por ello, promueve lo que califica como tácticas disruptivas. “Apoyamos a las organizaciones que dicen la verdad, alteran la normalidad y exigen una transformación a un ritmo de emergencia”, señala CEF en su página oficial.
CEF financia a cientos de organizaciones como XR. En ese sentido, resalta las protestas y el vandalismo que realizan para promover las políticas ambientalistas. “El movimiento global Extinction Rebellion, activo en más de 80 países, comenzó en el Reino Unido en 2018. El capítulo es responsable de algunas de las protestas climáticas más inspiradoras de la historia, incluida su ocupación de semanas de sitios claves en Londres en 2018 y su bloqueo de la distribución de la prensa de derecha en 2020”, asegura la organización en su página web.