Trump afirma que Estados Unidos no le comprará más petróleo a Venezuela: “Es una locura lo que estamos haciendo”

El presidente electo Donald Trump envió dos mensajes al régimen de Nicolás Maduro este lunes. El primero, que Estados Unidos dejará de comprar petróleo a Venezuela porque, según su criterio, el país no tiene necesidad de hacerlo y, segundo, que deberá aceptar a los inmigrantes venezolanos ilegales deportados o, de lo contrario, se enfrentará a duras consecuencias económicas.

“No tenemos por qué comprar energía a Venezuela cuando tenemos 50 veces más que ellos. Es una locura lo que estamos haciendo. No descansaremos hasta que Estados Unidos sea más rico, más seguro y fuerte que nunca antes”, dijo Trump a la prensa.

Luego, un miembro de la prensa consultó al presidente electo si su equipo de transición estaba manteniendo conversaciones con el régimen de Maduro en relación con sus planes de deportación masiva. Trump no respondió directamente la pregunta, pero sí envió una clara advertencia al dictador socialista venezolano.

“Los llevarán de vuelta. Todos serán llevados de vuelta. Y si no lo hacen, se enfrentarán a duras consecuencias económicas”, dijo Trump.

Las palabras del presidente electo se producen mientras líderes petroleros estadounidenses lo presionan para acercarse al régimen de Caracas y llegar a un acuerdo migratorio con Venezuela a cambio de mantener licencias petroleras.

Sin embargo, los emisarios petroleros sufrieron varios reveses luego de que Trump nombrara a Mike Waltz como su asesor de Seguridad Nacional y al cubanoamericano Marco Rubio como secretario de Estado.

Ambos republicanos son duros críticos de Maduro y aliados de la oposición venezolana, liderada por la conservadora María Corina Machado.

Machado, quien está en la clandestinidad mientras el régimen de Maduro la persigue a ella y a su equipo, articuló en el último año un movimiento político en busca de deponer al dictador socialista del poder. Con el gran apoyo de la sociedad venezolana, Machado, inhabilitada políticamente por el régimen de Maduro, respaldó al diplomático Edmundo González como el candidato opositor en las más recientes “elecciones” presidenciales en Venezuela.

Como era de esperarse, las autoridades electorales, controladas por Maduro, dieron ganador al dictador mientras la oposición liderada por Machado recabó las pruebas de la victoria de González con las papeletas electorales comunicadas por las máquinas de votación. Gracias a las boletas, los países occidentales, incluyendo EEUU, reconocieron a González como el presidente electo de Venezuela, quien tuvo que exiliarse en España en medio de amenazas contra él y su familia.

Ahora González, que sigue bajo amenaza de Maduro y sus aliados, ha prometido que regresará a Venezuela el próximo 10 de enero para juramentarse como nuevo presidente del país sudamericano.

Según las pruebas electorales ganadas por la oposición, González venció a Maduro por un margen amplio de dos a uno.

Tras el fraude electoral, el régimen de Maduro aumentó la represión política, secuestrando a cientos de activistas opositores y miles de ciudadanos que se manifestaron tras el anuncio del Consejo Nacional Electoral. Las principales organizaciones de derechos humanos han reportado casos de tortura e incluso de asesinatos extrajudiciales en el período postelectoral.