Trump advierte al fabricante Deere con potentes aranceles si continúa vendiendo equipos producidos en México

Durante un evento de campaña en Pensilvania, uno de los estados indecisos más determinantes en las próximas elecciones, el expresidente Donald Trump volvió a traer al ojo público su visión sobre los aranceles, apuntando directamente contra la empresa de maquinaria agrícola Deere & Co., que está trasladando parte de su producción a México.

El candidato republicano dijo que, en caso de ser elegido, Deere enfrentaría un potente arancel del 200% si vendía equipos fabricados en México que anteriormente se producían en el país.

El expresidente hizo la promesa luego de acusar a Deere de trasladar su producción a México, afirmación que la compañía de maquinaria agrícola negó.

"Piensan que van a fabricar productos más baratos en México y venderlos al mismo precio que antes para ganar mucho dinero deshaciéndose de nuestra mano de obra y nuestros empleos", afirmó enérgicamente Trump. "Si van a hacer eso, entonces vamos a imponer un arancel del 200% a todo lo que quieran enviar de regreso a Estados Unidos".

Las palabras de Trump se producen luego de que la empresa con sede en Illinois anunciara en junio que trasladaría parte de su producción de algunos modelos de cargadores de construcción pequeños y medianos a su planta en México desde Dubuque, Iowa, según el diario The Wall Street Journal.

Dos años atrás, Deere ya había decidido trasladar la producción de cabinas para tractores agrícolas grandes a México desde Waterloo, Iowa, y la expectativa es que para este 2024 se complete el traslado.

Sin embargo, el WSJ reportó que los ejecutivos de Deere explicaron que sus decisiones tienen el objetivo de “liberar espacio de fabricación y empleados en las plantas de EEUU para otros modelos”.

Según la compañía, en Waterloo se comenzará a ensamblar su nueva línea de tractores 9RX en lugar de las cabinas.

Puntualmente, Deere rechazó las afirmaciones de Trump diciendo que la empresa invirtió más de $2.500 millones en sus fábricas en EE.UU. en los últimos cuatro años.

“No estamos trasladando una gran parte de nuestra producción a México (…) Seguimos plenamente comprometidos con nuestra presencia de fabricación en EEUU”.

Sin embargo, más allá de la mención puntual a Deere, las palabras de Trump parecen ir claramente en su esfuerzo de promover políticas proteccionistas en una campaña electoral donde prometió reducir el desempleo incentivando a las empresas extranjeras a mover sus fábricas a Estados Unidos para evitar aranceles altos y aprovechar reducciones fiscales considerables en un gran mercado.

De hecho, según un alto asesor de Trump que conversó con el WSJ, es probable que Trump prometa en las próximas paradas de campaña atraer inversión extranjera mediante reducciones fiscales, como bajar la tasa del impuesto corporativo, ubicada en el 21%, hasta el 15%.