Tras las pérdidas económicas y los sucesivos escándalos, la junta de Boeing nombra a un nuevo CEO
La empresa aeroespacial, que designó a Robert Ortberg como sustituto de Dave Calhoun, también informó de importantes pérdidas económicas de 1.440 millones de dólares en el segundo semestre como resultado de la polémica sobre la seguridad y la calidad de sus aviones.
La junta de Boeing anunció este miércoles que Robert Kelly Ortberg había sido nombrado como nuevo director ejecutivo de la compañía.
El empresario ocupará su nuevo puesto a partir del 8 de agosto, fecha en la que el anterior CEO de la empresa, Dave Calhoun, saldrá de Boeing tal y como prometió hace unos meses.
Ortberg es un interesante candidato para ocupar el puesto de directivo en Boeing. El empresario de 64 años cuenta con una amplia experiencia en el sector aeronáutico. De hecho, dirigió al grupo Rockwell Collins, quien luego se convirtió en filial de RTX, hasta 2021, momento en el que decidió jubilarse.
Sin embargo, Robert Ortberg abandona su retiro para intentar que Boeing vuelva a ser "líder y pionero en nuestra industria", tal y como aseguró él mismo en un comunicado recogido por CNN:
"Me siento sumamente honrado y agradecido de unirme a esta icónica compañía. Boeing tiene una enorme y rica historia como líder y pionero en nuestra industria, y estoy comprometido a trabajar junto con los más de 170.000 empleados dedicados de la compañía para continuar esa tradición, con la seguridad y la calidad como prioridad".
No obstante, el empresario es consciente del reto que tiene por delante y no dudó en afirmar que "hay mucho trabajo por hacer". La empresa aeroespacial se enfrenta a una polémica sin precedentes que comenzó a principios de este año cuando explotó una ventanilla de emergencia de un Boeing 737 Max-9 operado por Alaska Airlines.
Este fue solo el principio de la historia. Tras este incidente, diversos aviones de la compañía aeroespacial comenzaron a tener distintas averías que, en más de una ocasión, provocaron accidentes que pusieron en peligro o incluso provocaron la muerte de sus pasajeros.
Quedaba claro que los vehículos de Boeing tenían graves problemas de seguridad, control de calidad y déficits en su producción.
Fallos que se vieron agravados cuando el extrabajador John Barnett, quien había reportado distintos problemas en los vehículos, apareció muerto justo después de testificar contra Boeing.
Todo ello provocó que la compañía comenzase a sufrir una crisis por la que el ahora ex director ejecutivo, Dave Calhoun, tuvo que dar explicaciones ante el Senado.
Boeing informa de pérdidas netas de $1.440 millones
El daño económico, sin embargo, ya estaba hecho. Boeing comenzó a reportar pérdidas que este miércoles llegaron a su punto más álgido cuando la compañía aeroespacial aseguró que tenía una pérdida neta de 1.440 millones de dólares durante su segundo trimestre.
Este déficit, explicó la compañía, se debía principalmente a que habían entregado menos aparatos comerciales debido a la crisis y eso había provocado una menor cantidad de ingresos que, durante este segundo semestre, se situó en los 16.900 millones de dólares, un 14,6% menos que en el anterior periodo.
Fabricar menos aviones no fue la única causa de la caída de los ingresos de Boeing. Según aseguró AFP, los negocios de defensa de la compañía, con contratos a precios fijos que registraron pérdidas por las dificultades en la cadena de suministros, la subida de los costos en ingeniería y otros problemas técnicos también impactaron de forma negativa a Boeing.