La 'Ley de Reducción de la Inflación' costará 740.000 millones y no rebajará los precios

El Senado ha aprobado la llamada Ley de Reducción de la Inflación, una medida que supone un gasto adicional de 740.000 millones de dólares. A pesar del nombre y del enorme gasto que prevé, la Oficina del Presupuesto del Congreso (CBO), una institución independiente, considera que no tendrá ningún efecto apreciable.

El periódico Newsmax, que ha accedido al informe de la CBO, cita la opinión de su director, Phillip Swagel: si se aprueba la medida, “en el año 2023 la inflación sería probablemente entre un 0,1% más baja y un 0,1% más alta que si seguimos” con las normas actuales. La tasa actual de inflación es del 9,1%.

Otro informe, éste realizado por la Tax Foundation, no sólo no cree que reducirá la inflación, sino que la va a agravar. El aumento del gasto y de los impuestos supondrá una pérdida del PIB a largo plazo del 0,1%, lo que entre otras cuestiones supone una destrucción de 30.000 empleos. Al reducir la capacidad de la economía americana de producir bienes, lejos de ayudar a reducir el aumento de precios, va a contribuir a su aumento. También se reducirán los salarios reales (un 0,1%) y el stock de capital (un 0,3%).

Una "masiva toma de poder"

El coste de la medida no es menor: 570.000 millones de dólares en impuestos (4.500 por hogar) en la próxima década. En realidad, a pesar del nombre, es una ley omnibus que sirve a distintos propósitos.

Supone una expansión de la reforma sanitaria de Barack Obama. Ese aumento del gasto, según un informe realizado por la CBO y el Comité Conjunto sobre los Impuestos (JCT), será en realidad mucho mayor, y supondrá un alivio especialmente para las familias más ricas. Una de las medidas que incluye la ley es la de permitir a Medicare negociar el precio de las medicinas.

Otro de los ámbitos de la nueva ley es el de la energía y el cambio climático. La norma prevé un coste de 369.000 millones de dólares entre gasto y reducciones de impuestos para la compra de vehículos eléctricos y de hidrógeno, y para hacer las viviendas más eficientes energéticamente. La ley también prevé ayudas para la transición a fuentes de energía más limpias.

Por otro lado, la ley doblará el tamaño del Internal Revenue Service, gracias a la creación de 87.000 nuevos funcionarios dedicados a recoger los impuestos de los americanos.

El senador Ted Cruz (R-Texas) ha criticado especialmente este aspecto: “Esos agentes de Hacienda están diseñados para ir por ti”, no para “perseguir a los multimillonarios y a las grandes empresas. Están diseñados para perseguir a las pequeñas empresas y a las familias trabajadoras de todo el país. Los demócratas están haciendo que el IRS sea más grande que el Pentágono, más el Departamento de Estado, más el FBI, más la Patrulla Fronteriza juntos. El IRS va a ser más grande. Esto es una masiva toma de poder”.

Cámara de Representantes

Los demócratas ven en la aprobación en el Senado un gran éxito político. Pero la medida aún tendrá que pasar por la Cámara de Representantes, en la que hay una mayoría demócrata muy ajustada: 220 frente a 210 del Partido Republicano. Quedan 5 asientos vacantes.