Parte de Europa y la ONU se burlan de las víctimas del terrorismo palestino

Mientras Israel todavía libra una guerra contra Hamás tras la brutal masacre del 7 de octubre, Noruega, Irlanda y España deciden premiar a los terroristas anunciando que reconocerán a un Estado palestino y la ONU opta por mimar a los asesinos homenajeando a Ebrahim Raisi, ‘el carnicero de Teherán’.

Tras la masacre del 7 de octubre, perpetrada por las bestias salvajes de Hamás y otras organizaciones terroristas palestinas, como así también demasiados civiles (racistas asesinos que no pertenecen oficialmente a un grupo determinado), ha llegado el momento de que parte de Europa premie a los terroristas palestinos y se burle de las víctimas.

Evidentemente, para una parte del mundo, no solo no se debe castigar a los violadores de mujeres, degolladores de bebés y asesinos de familias enteras, sino también es necesario reírse de los asesinados, de los secuestrados y de sus familias, como así también mimar con premios a los terroristas porque las víctimas fueron judías, o residían en el Estado judío, o se encontraban de visita allí. 

Este escupitajo en la cara de las víctimas por parte de las autoridades de Noruega, Irlanda y España, que recientemente anunciaron que van a reconocer la existencia del Estado palestino a partir del 28 de mayo, no se olvidará. Han decidido premiar a los autores de una masacre histórica, por lo que no son más que cómplices del terrorismo islámico, que también golpea a Europa. ¿Será que también reconocerían un califato independiente de ISIS en caso de, Dios no quiera, se produzca otro atentado en su territorio? 

La decisión, como era de esperar, fue celebrada por sus amigos de Hamás. Los terroristas calificaron de "etapa importante" el reconocimiento del Estado de Palestina y exigieron al resto del mundo sumarse al camino tomado por Noruega, Irlanda y España.

"Vemos esto como un paso importante hacia la afirmación de nuestro derecho a la tierra y el establecimiento de un Estado palestino con Jerusalén como capital", manifestó Hamás en un comunicado obtenido por AFP.

Similar fue la reacción de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), que sostuvo que se trata de un momento "histórico". 

El anuncio se produce casi dos semanas después de que Josep Borrell, el representante para Política Exterior de la Unión Europea (UE), asegurara que desde el Gobierno de España le habían confirmado que reconocerían el Estado palestino.

Vaya dupla la que conforman los socialistas Borrell y el presidente de España Pedro Sánchez, ¿verdad? El primero, que nos tiene acostumbrados a condenar a Israel por defenderse del terrorismo genocida, no tiene ningún problema con el hecho de que Irán quiera destruir al Estado judío. “Hay que vivir con eso”, expresó hace algunos años, dando a entender que su intolerancia es selectiva. Y Sánchez, el presidente que aún ostenta el poder por maniobras políticas inmorales y que tiene muchas explicaciones que dar en España por un caso de corrupción en el que está envuelta su esposa, se atrevió criticar la respuesta israelí tras la brutal masacre y a anunciar que reconocería un Estado palestino. Por lo tanto, ¿sorprende que ambos aliados del terrorismo islamista premien al terrorismo islamista y se rían de sus víctimas? 

La ONU y la Corte Penal Internacional también se ríen de las víctimas y premian al terrorismo islámico

Como no podía ser de otra manera, la ONU, liderada por António Guterres, quien supo justificar la masacre perpetrada por Hamás, no quiso quedar fuera de la premiación y de los festejos que realizan algunos europeos sobre las tumbas de las víctimas.

Este lunes, el Consejo de Seguridad de la ONU realizó un minuto de silencio en honor al fallecido presidente de Irán Ebrahim Raisi, conocido como el carnicero de Teherán por su participación en la dura represión contra la disidencia en su país.

Durante el momento, se vio a Robert Wood, embajador adjunto de Estados Unidos ante Naciones Unidas, participando del cuestionado minuto de silencio a petición de Rusia, China y Argelia, lo que despertó fuertes críticas en el país norteamericano.

El mimo al carnicero de Teherán se produce casi dos semanas después de que la Asamblea General de las Naciones Unidas votara a favor de recomendar la adhesión de Palestina a la ONU y su reconocimiento. La resolución, que es una victoria para el terrorismo palestino, fue aprobada con 143 votos a favor, nueve en contra y 25 abstenciones. El resultado demuestra que la mayoría de los Gobiernos entiende que se debe premiar a aquellos que cometen atrocidades contra los judíos o contra cualquiera que se atreva a convivir o compartir un festival de música con ellos, y que hay que reírse de las víctimas y escupir sobre sus tumbas. No hay otra explicación posible.

Y por si eso fuera poco, la organización UN Watch denunció recientemente que los empleados de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA, por sus siglas en inglés) están robando y vendiendo materiales de ayuda humanitaria destinados a los necesitados en Gaza. Y eso es lo que hacen en su tiempo libre, cuando no están adoctrinando en el odio a los niños palestinos, incitando a asesinar a los judíos o participando en actividades terroristas.

Karim Khan, fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) también decidió unirse a la diversión y reírse de las víctimas y sus familiares, ya que este lunes solicitó la detención del primer ministro de Israel Benjamín Netanyahu y de su ministro de Defensa Yoav Gallant, por crímenes cometidos en la Franja de Gaza durante la operación militar terrestre contra el grupo terrorista Hamás.

En el mismo anuncio, Khan pidió la detención de los tres principales líderes de Hamás, Yahya Sinwar, Mohamed Deif Diab Ibrahim al Masri e Ismaíl Haniyeh, a quienes acusa de ser los responsables de varios crímenes contra la humanidad cometidos contra la población civil israelí el 7 de octubre.

De esta manera, al equiparar al Gobierno de la única democracia del Medio Oriente que se defiende respetando el derecho internacional, con el grupo terrorista genocida que cometió una masacre histórica contra civiles inocentes, el fiscal también tomó la decisión de burlarse de las víctimas y premiar a las bestias asesinas que no dudarían en cortarle la cabeza incluso a él mismo si tuvieran la posibilidad de hacerlo.

¿Cuál es el objetivo de reconocer a un Estado palestino?

Seguramente, muchos pensarán que en realidad todos estos reconocimientos no están dirigidos a Hamás, sino a la Autoridad Palestina que gobierna en la Ribera Occidental y que está liderada por el partido Fatah, de Mahmud Abás, el moderado que justificó el Holocausto por la relación de los judíos con “la usura y el dinero”. Otros pueden pensar que en realidad se trata de un gesto hacia los civiles palestinos ¿A qué civiles se refieren? ¿A aquellos que ingresaron a Israel el 7 de octubre para cometer las mismas atrocidades que los terroristas, digamos, oficiales, o bien a los que justificaron la masacre, que representan a la gran mayoría de los inocentes civiles palestinos? 

Dor Shahar, un exresidente de Gaza que se convirtió al judaísmo y actualmente vive en Israel, dijo en declaraciones para Voz Media que un 99% de los gazatíes apoyan el terrorismo. De todos modos, el Estado judío cumple con el derecho internacional en la guerra, mientras Hamás y otros grupos terroristas usan a estos civiles como escudos humanos. Aparentemente, según una buena parte del mundo, este accionar también merece ser premiado. 

De cualquier modo, el hecho de premiar a Palestina con diversos reconocimientos en este momento es una burla a las víctimas de la masacre del 7 de octubre y a tantas otras del terrorismo islamista, además de ser un acto extremadamente cínico y oportunista en el que no queda claro cuál sería el beneficio de semejante medida y, como vimos, tampoco se entiende a quién está dirigida, ya que como bien dice Mossab Hassan Yousef, hijo de un exfundador de Hamás que critica duramente al terrorismo islamista, Palestina está conformada por diversas tribus que se odian entre sí, y que si no fuera por Israel, estarían matándose unas con otras. 

Claramente, hay muchos que están más interesados en demonizar a Israel que en apaciguar el sufrimiento palestino. Los resultados son y serán estrepitosos para el mundo libre, salvo para aquellos que quieren acabar con él.