La madre de la hija ilegítima de Hunter Biden pide su ingreso en prisión

Lunden Roberts reclama a un tribunal que el hijo del presidente permanezca encarcelado hasta que entregue sus registros financieros cumpliendo una orden judicial.

Lunden Roberts, madre de una hija ilegítima de Hunter Biden, ha solicitado su ingreso en una prisión de Arkansas tras negarse a cumplir con el requerimiento judicial de presentar sus registros financieros para ajustar la pensión que paga a la menor mensualmente. La demanda de la exstripper es su respuesta a los movimientos del hijo del presidente para dejar de pagar la manutención de la niña y evitar que ésta pudiera usar su apellido.

Hunter "está jugando con este tribunal"

La noticia fue adelantada por el Daily Mail el pasado viernes, que se hacía eco de la solicitud de los abogados de Roberts a un juez de Arkansas para que Hunter Biden ingresara en el centro de detención del condado de Cleburne "hasta que cumpla con las órdenes de este tribunal" de presentar sus registros financieros". El hijo del presidente solicitó hace seis meses reducir la cantidad que entrega en concepto de manutención a la pequeña, de cuatros años, a la que apenas reconoce.

En el escrito, los letrados de Roberts denuncian que Hunter "está jugando con este tribunal" puesto que "no hay excusa o justificación válida para que el demandado no facilite la información requerida". Tras la demanda de Hunter, la exstripper dio un paso más y pidió al tribunal que rebautizara oficialmente a su hija como Navy Joan Biden, para "beneficiarse de llevar el apellido de la familia Biden". Algo a lo que Hunter se opone alegando que se trata de "una guerra política contra la familia Biden" y que el cambio "privará a la niña de su pacífica existencia".

Acuerdo extrajudicial

No es la primera vez que los examantes se ven en los tribunales. Cuando Roberts recurrió a la vía judicial para reclamar una pensión para la menor, Hunter alegó estar desempleado, por lo que no podría hacer frente a un pago mensual. No obstante, los abogados de Roberts demostraron que el hijo del presidente vivía en un piso en Hollywood por cuyo alquiler desembolsaba 12.000 dólares cada mes y conducía un porsche. Al exigir un juez que presentara sus cuentas, Hunter y Roberts anunciaron un acuerdo extrajudicial.

Los letrados de Roberts han reclamado a Hunter también los registros de los negocios por los que está siendo investigado por la Cámara de Representantes, como los que desarrolló en Ucrania y China. También se le reclama que comunique cuánto paga por sus abogados y agentes, así como los ingresos por su nueva faceta como artista de arte abstracto, con la que ya ha conseguido hasta 500.000 dólares por una de sus obras. El tribunal accedió a la petición, aunque dejó claro que no se harían públicos.

Hunter, en la Casa Blanca

Según Miranda Devine, en The New York Post, diversas fuentes apuntan a que Hunter estaría viviendo en la Casa Blanca para evadir las notificaciones legales de la madre de su hija. Rodeado por el Servicio Secreto de su padre y protegido por sus propios agentes, es difícil que un agente judicial llegue hasta él para entregarle los papeles, según afirman fuentes cercanas al caso. Los rumores de que Hunter, su actual esposa y su hija se encuentran en la Casa Blanca se han visto reforzados durante los últimos meses por testigos que lo han visto en sus proximidades, así como por el creciente número de apariciones junto al presidente (llegó a viajar a Irlanda durante el viaje oficial).