El gobernador de Texas, Greg Abbott, emitió una declaración de desastre en varios condados del sur del estado debido a la llegada de , que ya está dejando abundantes precipitaciones y fuertes ráfagas de viento.

Concretamente, la medida se aplica en 51 condados: Aransas, Atascosa, Bandera, Bee, Bexar, Brazoria, Brooks, Calhoun, Cameron, Chambers, DeWitt, Dimmit, Duval, Edwards, Fort Bend, Frio, Galveston, Goliad, Gonzales, Harris, Hidalgo, Jackson, Jefferson, Jim Hogg, Jim Wells, Karnes, Kenedy, Kinney, Kleberg, La Salle, Lavaca, Live Oak, Matagorda, Maverick, McMullen, Medina, Nueces, Orange, Real, Refugio, San Patricio, Starr, Uvalde, Val Verde, Victoria, Webb, Wharton, Willacy, Wilson, Zapata, y Zavala.

"De conformidad con la autoridad que me confiere la Sección 418.014 del Código de Gobierno de Texas, por la presente declaro el estado de desastre en los condados previamente enumerados con base en la existencia de dicha amenaza", dijo Abbott en un comunicado.

La declaración de desastre implica que Texas desplegará todos los recursos estatales necesarios en las zonas afectadas para minimizar los daños que acarree Alberto. "Autorizo el uso de todos los recursos disponibles del gobierno estatal y de las subdivisiones políticas que sean razonablemente necesarios para hacer frente a esta catástrofe", añadió Abbott.

A través de las redes sociales, el gobernador pidió a todos los residentes que atiendan "a la orientación de los funcionarios estatales y locales para mantener a sí mismos ya sus seres queridos a salvo".

Antes de que llegue a tierra, Alberto dejó ya ráfagas de viento de 40 millas por hora (mph), según indicó el Servicio Meteorológico Nacional (NWS).