¿Nuevo negocio para los carteles mexicanos? Las citas de la CBP One, en la mira
Las organizaciones criminales podrían estar aprovechando una falla en la aplicación de la Patrulla Fronteriza para vender citaciones necesarias para entrar en Estados Unidos.
Los carteles mexicanos podrían estar lucrando a partir de la aplicación para solicitar citas con la Patrulla Fronteriza, introducida este año por la Administración Biden. Así lo asegura una exclusiva de Washington Examiner, que asegura haber accedido a documentos internos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
La aplicación CBP One se ha vuelto esencial para quienes desean inmigrar a los Estados Unidos desde México. Como reza la web de la Patrulla Fronteriza, permite a "extranjeros ubicados en el centro o norte de México que pretendan viajar a Estados Unidos (...) solicitar una cita para presentarse (...) en los puertos de entrada terrestres de la frontera suroeste".
De acuerdo con el Examiner, los grupos de crimen organizado se estarían sirviendo del límite geográfico de la aplicación -tener que encontrarse en el "centro o norte de México"- para añadir un servicio más a su catálogo: la venta de turnos a personas que se encuentran en cualquier latitud. Para esto, se servirían de un VPN (red privada virtual), que permitiría engañar a la aplicación, simulando que el dispositivo se encuentra en suelo mexicano.
Pero CBP One no se habría convertido sólo en el boleto de entrada a Estados Unidos, sino que también a México. Anna Giaritelli, reportera detrás de la información, sostiene que el Instituto Nacional de Migración de México ordenó a sus oficiales que permitiesen entrar a los inmigrantes provenientes de Guatemala sólo si contaban con una cita en la aplicación estadounidense. De esta forma, los traficantes podrían vender el acceso a ambos países, Estados Unidos y México.
Los documentos analizados revelarían, además, que este servicio está siendo publicitado abiertamente, con mayor éxito en Haití, Cuba y Honduras. Asimismo, una fuente del DHS habría asegurado que Alejandro Mayorkas, secretario del Departamento de Seguridad Nacional, y Troy Miller, Comisionado Interino de Aduanas y Protección Fronteriza, se habrían mostrado preocupados por esta falla, aunque todavía no habrían impulsado ningún plan para solventarla.
Una vocera del CBP, Erin Waters, contactada por el medio habría negado las revelaciones.