Kevin Spacey, Johnny Depp... La Justicia absuelve a acusados del Me Too
El caso del exprotagonista de 'House of Cards' es el último que el movimiento trató de imputar llevándose el rechazo de los tribunales.
Kevin Spacey es la última víctima de aquellos que acusan sin fundamento, sin razonamiento. El último caso en el que no se respetó la presunción de inocencia, sino que se actuó contra su persona y contra sus intereses personales por unos hechos que, ahora, los tribunales decidieron no atribuírselos y declararlo no culpable. Aquellos que le acusaron pronto recibieron el beneplácito de movimientos sociales de gran repercusión como el afamado Me Too, surgido para denunciar las agresiones sexuales de hombres contra mujeres o contra otros hombres, como en el caso de Spacey.
A raíz de estas acusaciones, el actor perdió papeles protagónicos como el de la serie House of Cards. De hecho, tuvo que indemnizar a sus productores con unos 31 millones de dólares. Y todo ello antes de que se le declarase no culpable.
Tras la resolución del caso de Kevin Spacey, esos movimientos quedaron en evidencia, perdiendo credibilidad. Pero no es el único caso en el que el acusado acababa siendo el no culpable, sino el inocente.
Johnny Depp
El breve matrimonio del protagonista de la saga de Piratas del Caribe con Amber Heard tuvo más problemas que momentos de alegría. La actriz lo demandó por una agresión física supuestamente ocurrida en 2016. Un año después ella la retiró aunque, no conforme, volvió a la carga en 2018 cuando publicó un artículo de opinión en The Washington Post en el que aseguró que era "una figura pública que representa el abuso doméstico". Pese a no tener referencia alguna a su persona, Depp se dio por aludido y contraatacó denunciándola por difamación. Una batalla judicial que terminó a finales de 2022. La Justicia determinó que Heard debía pagar a su exmarido un millón de dólares. Ella cumplió y, tras ello, escapó del foco mediático de Hollywood para instalarse en España.
Al margen de las acusaciones, las visitas a los tribunales y demás, el protagonista de Edward Scissorhands o Donnie Brasco perdió millonarios contratos cinematográficos. Los productores de las sagas de Piratas del Caribe o de Animales Fantásticos decidieron prescindir de Depp mucho antes de que la Justicia resolviese a su favor.
Benjamin Mendy
Para muchos puede que el nombre de Benjamin Mendy no les suene. Pero es otro de los hombres que sufrieron las consecuencias por unas acusaciones de delitos sexuales que resultan que nunca sucedieron y que fueron apoyadas por los mediáticos movimientos.
Este futbolista, campeón del Mundial 2018 con la selección francesa, fue acusado de cometer agresión sexual y violación contra varias mujeres -una de ellas, menor de edad- en Manchester (Inglaterra) cuando pertenecía al roster del Manchester City. Mientras avanzaba la investigación, Mendy estuvo un tiempo en una prisión británica. De hecho, el club rescindió su contrato. Eso sí, él siempre sostuvo que era inocente -pese a que se le acusaba, incluso, de ser "un depredador sexual"- y que todo este proceso finiquitaría su trayectoria profesional.
A mediados de julio de 2023, el caso dio un vuelco absoluto y Mendy fue absuelto de todos los cargos que se presentaron contra él. Esa misma semana, firmó un nuevo contrato profesional con el FC Lorient, de la primera división francesa, para continuar con una trayectoria deportiva que intentaron destrozar.
Woody Allen
El director de Manhattan, Match Point o Midnight in Paris fue acusado por una de sus hijas adoptivas, la escritora Dylan Farrow, de haber abusado sexualmente de ella en 1993 cuando apenas ella tenía 7 años.
Un año después, una investigación realizada por médicos forenses de la Clínica de Abuso Sexual Infantil del Hospital Yale-New Haven determinó que Dylan no fue abusada. Acto seguido, las autoridades cerraron el caso y Woody Allen quedó libre de culpa.
Tres décadas después, el caso sigue en boca de lo mediático. En el momento de la acusación, el movimiento Me Too aún no había nacido. Aun así, años después se aprovechó y decidió apoyar a una Dylan Farrow empeñada en asegurar que sufrió agresiones sexuales por parte de su padre adoptivo.
Morgan Freeman
Ganador de un Óscar como Mejor Actor de Reparto por Million Dollar Baby, Morgan Freeman fue víctima de una acusación falta sobre unos presuntos delitos sexuales que había cometido.
En 2018, una asistente de la película Going In Style le dijo a CNN que Freeman "la sometió a contactos no deseados y comentarios sobre su figura y vestimenta casi a diario". La trabajadora llegó a asegurar que el actor "trataba de levantar mi falda y me preguntaba si llevaba ropa interior". Tras esa acusación, llegaron otras muchas. Concretamente, 15 personas más trataron de incriminarle.
Pero su caso nunca llegó a los tribunales. Y las acusaciones acabaron desapareciendo. De hecho, se llegó a decir que su caso fue obra de una manipulación periodística, según informó el medio español El Mundo.