Donald Trump carga contra los senadores republicanos opuestos a su política arancelaria

Hay senadores en la bancada republicana que van a obstaculizar la política de aranceles de Donald Trump. Al menos eso cree el presidente, quien dedicó un mensaje de advertencia contra varios congresistas conservadores algunas horas antes de celebrar su "Día de la Liberación" con impuestos a productos extranjeros.

Mitch McConnell, de Kentucky, Susan Collins, de Maine, Lisa Murkowski, de Alaska, y Rand Paul, también de Kentucky, están en el punto de mira del presidente, quien teme que se alineen con los demócratas en el Senado para ir en contra los aranceles recíprocos del Gobierno federal a un nutrido grupo de países. 

Trump utilizó el argumento de la guerra contra las drogas para cargar contra el grupo de legisladores republicanos. Pese al bajo volumen de drogas que entran en Estados Unidos desde Canadá, el presidente asegura que si los legisladores no apoyan los aranceles, están liberando a Canadá de la presión para hacer frente al tráfico de drogas. 

El presidente estimó que estos senadores deberían "luchar contra el empuje salvaje y flagrante de los demócratas para no penalizar a Canadá por la venta, en nuestro País, de grandes cantidades de Fentanilo, arancelando el valor de esta horrible y mortal droga para hacerla más costosa de distribuir y comprar", según escribió en redes sociales. 

"Están jugando con la vida del pueblo estadounidense, y directo a las manos de los Demócratas de Izquierda Radical y los Cárteles de la Droga", añadió el presidente. 

No se sabe cuáles de todos estos senadores podrían apoyar la moción de Tim Kaine, demócrata de Virginia, para tumbar el estado de emergencia nacional que Trump declaró para imponer amplios aranceles al vecino del norte de Estados Unidos a principios de este año.

Susan Collins, senadora de Maine, aseguró que las políticas arancelarias del Gobierno federal erosionan las relaciones de Estados Unidos con un aliado como el canadiense. "Imponer aranceles a Canadá, que es nuestro vecino más cercano, [un] aliado amigo, es un error enorme y causará trastornos en las economías de ambos países", declaró a la prensa el pasado martes, después de recordar tan solo el 1% del fentanilo que entra en Estados Unidos lo hace por la frontera norte.