El exinformante del FBI acusado de mentir sobre los negocios de los Biden fue arrestado por riesgo de fuga

Alexander Smirnov, un exinformante del FBI que fue detenido la semana pasada bajo la acusación de proporcionar información falsa sobre los presuntos negocios de los Biden con una compañía energética ucraniana, fue arrestado otra vez este jueves.

A pesar de haber sido liberado por un juez en Nevada a principios de esta semana, Smirnov, de 43 años y con doble ciudadanía estadounidense e israelí, fue nuevamente detenido por orden de un juez en California, argumentando riesgo de fuga. La detención tuvo lugar en la mañana del jueves en las oficinas legales de Smirnov en el centro de Las Vegas, según sus abogados David Chesnoff y Richard Schonfeld.

El caso contra Smirnov

El caso contra Smirnov se centra en una acusación presentada la semana pasada ante una corte federal en California. Esta sostiene que el exinformante sirvió como “fuente confidencial humana” para el FBI durante al menos una década. Durante ese tiempo se le advirtió en repetidas ocasiones que debía proporcionar información veraz al FBI. Sin embargo, el exinformante supuestamente hizo caso omiso de las advertencias al dar declaraciones falsas al FBI y crear registros falsos sobre el presunto esquema de sobornos multimillonario que involucra a los Biden y a la empresa ucraniana Burisma.

Los fiscales argumentan que Smirnov mintió al asegurar que ejecutivos de Burisma le pagaron al presidente Biden y a su hijo Hunter Biden 5 millones de dólares a cada uno en 2015. Esta declaración fue crucial en la investigación del juicio político republicano en el Congreso.

"El acusado transformó sus contactos comerciales rutinarios y extraordinarios con Burisma en 2017 y más tarde en acusaciones de soborno contra [Joe Biden], el presunto candidato de uno de los dos principales partidos políticos a la presidencia, después de expresar parcialidad contra [ Joe Biden] y su candidatura”, indica la acusación. En caso de ser declarado culpable, Smirnov podría enfrentar una condena máxima de 25 años de prisión.