La Fiscalía se niega a entregar al Congreso la documentación sobre la investigación a Trump y acusa al GOP de intromisión
Invita a los congresistas republicanos a acudir a los tribunales de Nueva York o al Tribunal Supremo si creen que se trata de una "acusación política" e "infundada".
La oficina del fiscal de distrito de Manhattan Alvin Bragg se negó a facilitar la documentación sobre la investigación a Donald Trump por el caso Stormy Daniels que presidentes de varios comités de la Cámara de Representantes le habían requerido. En una carta remitida al Congreso, la consejera general de la Fiscalía, Leslie Dubeck, acusó a los legisladores republicanos de entrometerse con "una investigación sin precedentes sobre un proceso local pendiente" reclamando información que no se ha hecho pública y cuya divulgación es un delito grave.
La misiva es muy crítica con la petición de los conservadores, que también citaron a declarar a Bragg. El fiscal, por boca de Dubeck, destaca que el congreso no tiene potestad para inmiscuirse en asuntos de justicia local, sino que esto es competencia de los tribunales y estados, "de acuerdo con la Décima Enmienda".
Críticas a la "falsa expectativa" del arresto de Trump
Según la Oficina del fiscal, todo se debe a las declaraciones de Donald Trump el pasado sábado en las que denunciaba que sería detenido el martes por Bragg y hacía un llamamiento a sus seguidores a "recuperar América". "La carta [de los congresistas republicanos] sólo llegó después de que Donald Trump creara la falsa expectativa de que sería detenido al día siguiente y de que sus abogados le instaran, al parecer, a intervenir. Ambos hechos constituyen una base legítima para la investigación del Congreso", se puede leer.
Sobre este asunto, la Fiscalía asegura que, en el caso de que los representantes del GOP consideren que la acusación contra el expresidente tiene "fines políticos" y es "infundada", deberían presentar una denuncia "en los tribunales de Nueva York" o acudir al Tribunal Supremo.
Divulgar información confidencial, "un delito grave"
En el escrito, Dubeck recuerda a los republicanos que "en Nueva York, el Fiscal de Distrito es un funcionario constitucional encargado de 'la responsabilidad de llevar a cabo todos los enjuiciamientos por crímenes y delitos reconocibles por los tribunales del condado en el que sirve'. Estos son poderes policiales por excelencia que pertenecen al Estado, y su carta [de Jim Jordan y otros congresistas conservadores) se adentra en un territorio muy claramente reservado a los estados". Además, sugiere que la investigación del Congreso se está "llevando a cabo únicamente para el engrandecimiento personal de los investigadores o para 'castigar' a los investigados", y es, por tanto, "indefendible".
La Fiscalía subraya que los conservadores solicitaron "información no pública sobre una investigación penal en curso, que es confidencial según la legislación estatal. La revelación por el fiscal de pruebas del gran jurado es un delito grave a menos que sea "en el desempeño adecuado de sus funciones oficiales o por orden escrita del tribunal". Además, añade que "las declaraciones de testigos a la Fiscalía están protegidas por el privilegio del interés público y protege de la divulgación pública los materiales "recopilados con fines policiales" cuando su divulgación "interfiera con las investigaciones policiales" o "revele información confidencial relativa a una investigación penal".
Además, Bragg indicó que, "en consonancia con estas obligaciones constitucionales, la Fiscalía es consciente de la política "habitual" del DOJ de no facilitar al Congreso información no pública sobre las investigaciones".
El GOP responde: "Hacer Manhattan segura de nuevo"
Desde su cuenta de Twitter, los miembros del Partido Republicano de la Comisión judicial respondieron a esta negativa recordando a Bragg el aumento de la delincuencia en su distrito y reclamándole más implicación para "hacer Manhattan segura de nuevo".
Daniels entrega grabaciones "que harán daño"
Aunque se especuló con que el gran jurado se reuniría el jueves, la sesión fue finalmente anulada y pospuesta para la semana que viene. Los fiscales amagaron con presentar un nuevo testigo clave, pero no se recogió declaración a nadie a lo largo del día.
Además, la ex actriz porno Stormy Daniels, que acusa a Trump de pagarle 130.000 dólares por su silencio sobre una presunta relación entre ambos, anunció en Twitter que ha puesto a disposición de su abogado grabaciones "que harán mucho daño" y que podrían resultar decisivas en el caso.