Muere una exrehén de Hamás mientras el 2024 llega a su fin con 100 personas, entre las que hay siete estadounidenses, aún retenidas en Gaza

Hanna Katzir, una mujer de 77 años que fue liberada por Hamás en 2023 como parte de un acuerdo de alto el fuego tras haber sido secuestrada durante el 7 de Octubre, murió como consecuencia del deterioro en su estado de salud producto del sufrimiento por el que atravesó desde la masacre, indicó la comunidad Nir Oz, en sur de Israel, donde Katzir residía y de donde fue secuestrada.

Tras regresar a Israel, Katzir descubrió que su esposo Rami, de 79 años, había sido asesinado, y que su hijo Elad, de 47, aún se encontraba retenido en la Franja de Gaza. Sin embargo, en abril de este año, el Ejército israelí informó que Elad había sido asesinado por terroristas palestinos. Su cuerpo fue hallado en la ciudad gazatí de Jan Yunis. 

Carmit Palti Katzir, su hija, expresó: "Mamá fue una mujer, esposa y madre amorosa y dedicada, todo en ella era amor. Su corazón no pudo soportar el terrible sufrimiento desde el 7 de Octubre", señaló el periódico israelí Ynet.

El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu también se refirió a la muerte de Katzir. “Mi esposa Sara y yo lamentamos profundamente el fallecimiento de Hanna Katzir, quien murió después de un año de lucha por su vida. Logramos traer de vuelta a Hanna, quien fue cruelmente secuestrada por Hamás el 7 de Octubre, pero su cuerpo y su alma llevaron las cicatrices del horror hasta su último día. Abrazamos a la familia Katzir y estamos comprometidos a hacer todo lo posible, sin descanso, hasta traer a todos nuestros rehenes de vuelta a casa".

Las amenazas a Hamás de Trump y el secretario de Seguridad Nacional entrante Mike Waltz

El presidente electo Donald Trump lanzó a principios de diciembre una dura amenaza contra el grupo terrorista palestino Hamás, afirmando que si los rehenes que se encuentran retenidos en la Franja de Gaza no son liberados hasta el día que asuma la presidencia, habrá un “infierno” en Medio Oriente. 

En una entrevista reciente con el presentador conservador estadounidense Ben Shapiro, el representante republicano Mike Waltz, quien fue designado por el presidente electo Donald Trump como asesor de Seguridad Nacional para su Gobierno, advirtió a Hamás que la Administración entrante adoptaría una política de tolerancia cero en relación a los rehenes. 

Waltz advirtió que para la Administración entrante, “si secuestras a un estadounidense (...) habrá consecuencias financieras para ti, y tal vez una bala en tu maldita frente”.

“Si los malos se sienten incentivados a tomar más [rehenes] porque cada vez obtienen más, entonces seguirán haciéndolo. Si los malos no sienten nada más que el costo y el dolor de secuestrar a nuestra gente, dejarán de hacerlo”, agregó el asesor de Seguridad Nacional entrante.

Waltz indicó además que Trump no tendrá ningún interés en negociar la liberación de los estadounidenses.

Cien personas siguen retenidas por Hamás y otros grupos terroristas en Gaza

Durante la masacre del 7 de Octubre, en la que más de 1.200 personas fueron brutalmente asesinadas, 251 israelíes y extranjeros fueron secuestrados por Hamás y otros grupos terroristas palestinos y llevados por la fuerza a la Franja de Gaza. Desde entonces, 117 han regresado a Israel con vida como parte de acuerdos de alto el fuego y otras ocho tras ser rescatadas en espectaculares operaciones del ejército. Además, las fuerzas israelíes llevaron de regreso a Israel los cuerpos de 38 rehenes, la mayoría de ellos murieron asesinados por terroristas palestinos, en tanto que un puñado perdió la vida como consecuencia de los combates en la guerra.

Se estima que aún permanecen en Gaza 96 personas secuestradas el 7 de Octubre, dos israelíes que permanecen como rehenes desde años antes de la masacre tras haber cruzado a la Franja por sus propios medios, como así también los cuerpos de dos soldados que murieron en la Operación Margen Protector de 2014 contra terroristas en Gaza.

Según funcionarios israelíes, siete de los 100 rehenes que se cree que aún se encuentran en Gaza tienen ciudadanía estadounidense, aunque se estima que solo tres de ellos siguen vivos, indicó el periódico israelí The Times of Israel.