Tulsi Gabbard, la nominada de Trump para la Oficina de Inteligencia Nacional, respalda la no intervención en Siria
La excongresista destacó que su experiencia militar y sus despliegues en zonas de conflicto han sido determinantes para formar su perspectiva sobre la política exterior.
Tulsi Gabbard, nominada por el presidente electo Donald Trump para dirigir la Oficina de Inteligencia Nacional, expresó su respaldo a las recientes declaraciones de Trump sobre la no intervención en el conflicto sirio. Su postura ha generado debate mientras se prepara para enfrentar el proceso de confirmación en el Senado.
"Apoyo plenamente y estoy totalmente de acuerdo con las declaraciones que el presidente Trump ha hecho en estos últimos días con respecto a los acontecimientos en Siria", declaró Gabbard frente a un grupo de periodistas al llegar al Capitolio.
La excongresista destacó que su experiencia militar y sus despliegues en zonas de conflicto han sido determinantes para formar su perspectiva sobre la política exterior. "He sido testigo directo de los devastadores costos humanos y estratégicos de las guerras prolongadas, así como del impacto del terrorismo islamista", señaló.
Gabbard agregó que el enfoque de Trump para evitar conflictos innecesarios en el extranjero refleja un liderazgo que prioriza los intereses de seguridad nacional y la estabilidad del país, una de las principales razones por las que respalda plenamente su visión.
La postura de Trump: evitar involucrarse en Siria
Trump, quien se ha manifestado repetidamente en contra de prolongar conflictos en el extranjero, reiteró su enfoque de mantener a Estados Unidos al margen del conflicto en Siria. En publicaciones recientes en Truth Social, el presidente electo describió a Siria como "un desastre" y subrayó que "ESTADOS UNIDOS NO DEBERÍA TENER NADA QUE VER CON ELLO". Estas declaraciones se produjeron después de que se informara que Bashar Asad, líder del régimen sirio, abandonó el país en medio del avance de las fuerzas rebeldes.
El viaje de Gabbard a Siria
La nominación de Gabbard ha traído de vuelta las críticas sobre su viaje a Siria en 2017, cuando se reunió con Bashar Asad como parte de un esfuerzo por explorar soluciones diplomáticas al conflicto. Este viaje generó cuestionamientos y acusaciones en su contra, incluyendo señalamientos de que habría servido como herramienta de propaganda rusa. Gabbard ha rechazado estas alegaciones de manera categórica.
A pesar de estas controversias, Gabbard ha obtenido el apoyo de más de 250 veteranos que valoran su experiencia en el terreno y su enfoque pragmático hacia los desafíos de la política exterior.
El proceso de confirmación
El inicio de las audiencias en el Senado será clave para definir el futuro de Gabbard en la Oficina de Inteligencia Nacional. Su historial, particularmente sus posiciones antiintervencionistas y su experiencia militar, será sometido a un escrutinio detallado por parte de los legisladores. Este análisis buscará determinar si está preparada para asumir un papel estratégico en la seguridad nacional de Estados Unidos.