"El discurso progresista me explotó en la cara": Kamala pierde el voto judío demócrata, que se inclina por Trump
Miembros de la comunidad judía que solían apoyar a los demócratas explicaron a un medio israelí los motivos por los que votarán por Trump el 5 de noviembre.
Un informe realizado por el periodista israelí Liel Leibovitz para el periódico Israel Hayom reveló que una gran cantidad de miembros progresistas de la comunidad judía estadounidense están abandonando al Partido Demócrata y planean votar al candidato republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, a pesar de que, para algunos, el magnate no sea de su mayor agrado.
Leibovitz entrevistó para el periódico israelí a personas de la comunidad judía que solían ser partidarias del Partido Demócrata, pero que consideran que no fueron ellos quienes abandonaron a esta fuerza política, sino que fueron muchos de sus integrantes los que abandonaron los valores que, según ellos, representaban los demócratas.
La justificación del liderazgo demócrata a las protestas pro-Hamás
Rona Kaufman, una profesora de derecho de una prestigiosa universidad de Pensilvania, contó que en 2021, durante una operación a gran escala llevada a cabo por Israel en la Franja de Gaza, se reunió con otros miembros de la comunidad judía en el campus, donde cantaron canciones y expresaron su apoyo al Estado judío en su lucha contra Hamás. Sin embargo, a pesar de que se trató de una manifestación pacífica, fue presentada en la radio pública como una concentración de odio contra Palestina.
La académica señaló que además comenzó a preocuparse entonces por el hecho de que cada vez más colegas se identificaban como antisionistas con el fin de disfrazar su discurso antisemita, razón por la cual decidió organizar una conferencia académica para debatir el asunto. Y luego ocurrió la masacre del 7 de Octubre.
Kaufman sostuvo que pensó que el brutal ataque en el sur de Israel haría evidente para todos lo que era evidente para ella; que aquellos que criticaban duramente al Estado judío, especialmente las feministas, se percatarían de que fueron engañados, ya que se darían cuenta de que aquellos que decían ser luchadores por las libertad en realidad creían en una ideología de asesinato y violación. Pero nada de eso ocurrió, al contrario.
Las universidades se convirtieron en bastiones de odio, donde las protestas antiisraelíes comenzaron a masificarse, los estudiantes y profesores judíos empezaron a ser acosados y hasta el día de hoy se realizan manifestaciones en favor de grupos terroristas como Hamás y Hezbolá. Asimismo, los medios que ella había leído durante toda su vida informaban y siguen informando con mentiras y un marcado sesgo contra Israel.
Kaufman explicó que peor aún es el hecho de que el Partido Demócrata, al que había apoyado durante toda su vida, se ha expresado, en el mejor de los casos, con dos caras. Si bien por un lado sus líderes respaldaron a Israel tras el 7 de Octubre, por otro mostraron simpatía por las violentas protestas pro-Hamás. Por lo tanto tomó la decisión de hacer algo que hace no muchos años parecía imposible: votar por Donald Trump, a pesar de que no sea de su mayor agrado.
La académica manifestó que en este momento no puede apoyar al Partido Demócrata y que votará por los valores que más le importan, por lo que remarcó que Trump es el candidato que más fielmente representa esos valores, ya que el republicano vela por la seguridad de Estados Unidos y todos sus ciudadanos, judíos y no judíos.
Trump “no fue un dictador ni un fascista”
Leah, otra mujer judía que solía votar por el Partido Demócrata afirmó: “Todo el discurso progresista me explotó en la cara”. Y reconoció que Trump, ese candidato al que tanto temía, hizo un muy buen trabajo. “No fue un dictador ni un fascista” durante su mandato como presidente, sostuvo. Y agregó que el republicano apoyó a Israel, promovió los Acuerdos de Abraham del Estado judío con Emiratos Árabes Unidos, Baréin, Marruecos y Sudán, lo que derivó en una importante estabilidad en la región.
Leah remarcó que a pesar de esos logros de Trump, los demócratas en su trabajo “perdieron la cabeza y lo insultaban de una manera completamente desconectada de la realidad”.
Leah votó por Trump en 2020, aunque confesó que lo hizo con disgusto. Sin embargo, esta vez manifestó que lo hará convencida.
La votante judía explicó que la Administración Biden-Harris le ha atado las manos a Israel para responder con la contundencia necesaria a los terroristas. En cambio, añadió, Trump sabe quiénes son los buenos y quiénes son los malos, por lo el republicano ayudará a los buenos a ganar. Esta diferencia, dijo, no es menor.
La izquierda se volvió antiestadounidense
Shoshana, una votante judía de Florida, pidió que Israel Hayom no publique su apellido, ya que teme que sus amigos del trabajo se molesten con ella si descubren que votará por Trump. "Toda mi vida he votado por los demócratas", declaró. Pero dijo que ha cambiado de postura debido a que la izquierda se ha vuelto antiprogresista y antiestadounidense.
La joven añadió que se opone a las políticas de género que, dijo, están basadas en la envidia y el resentimiento y que son respaldadas por “pseudocientíficos”. Shoshana calificó de “ridícula” la idea del género fluido, ya que considera que no se puede cambiar de género “con un movimiento de la mano”.
De todos modos, la joven afirmó que principalmente votará por Trump “porque soy sionista”.
“El peor nazi de la historia”
El acto llevado a cabo por Trump en el Madison Square Garden fue comparado por muchos medios con un evento realizado por partidarios nazis en ese mismo lugar en el año 1939.
Esta comparación sorprendió a Aaron, quien también pidió que no se publicara su apellido, que estuvo en el evento envuelto en una bandera israelí con algunos de sus amigos judíos.
Todos ellos se burlaron de la forma en que muchos medios decidieron retratarlos. "Miren cuántos judíos hay aquí", dijo. "Trump es el peor nazi de la historia”, añadió sarcásticamente.
Cada vez más judíos abandonan al Partido Demócrata
Leibovitz señaló además que según una encuesta publicada recientemente por el Manhattan Institute, un importante instituto de investigación estadounidense, Kamala Harris podría ser la candidata demócrata que obtenga los niveles de apoyo más bajos entre los judíos estadounidenses en casi cinco décadas.
Esta caída en el apoyo judío a los demócratas, señaló la encuesta, está relacionada con el creciente antisemitismo en el Partido Demócrata y con la forma en que en esta fuerza política se toleran críticas extremas contra Israel en la que incluso acusan a ese país de perpetrar un “genocidio”.