Meloni endurece leyes sobre seguridad: mano dura contra manifestaciones, inmigración y ocupación ilegal
La líder italiana incluye en la normativa la posibilidad de inspeccionar los móviles de solicitantes de asilo y 20 nuevos delitos penales o agravantes, endureciendo las sentencias para quienes se resistan a la policía
Giorgia Meloni, primer ministro de Italia
El Gobierno de Giorgia Meloni busca implementar un amplio grupo de normas de seguridad que castigará con hasta dos años de cárcel el corte de carreteras o vías férreas y prohibirá a los inmigrantes ilegales comprar una tarjeta para su móvil sin permiso. El decreto también castigará la ocupación de viviendas con penas de dos a siete años de cárcel y utilizar a un menor para mendigar estará castigado con hasta cinco años de prisión.
La nueva ley buscará también castigar a las ONG de rescate, así, las entidades que identifiquen barcos de inmigrantes y no comuniquen su actividad a las autoridades serán multadas con hasta 10.000 euros. La nueva norma ha sido bautizada como ‘ley anti-Gandhi’ por la oposición, ya que sostienen, los adversarios de la líder italiana, que se dirige contra las manifestaciones pacíficas, cuyas sanciones se aplicaban hasta ahora por la vía administrativa.
La norma permitirá también inspeccionar los móviles de solicitantes de asilo para supervisar toda la información dada por peticionarios de refugio internacional. E incluye 20 nuevos delitos penales o agravantes, endureciendo las sentencias para quienes se resistan a la policía. Al mismo tiempo, prolongaría la prisión hasta ocho años para los reos que participen en acciones como huelgas de hambre.
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