España: Pedro Sánchez se niega a declarar contra su esposa, investigada por tráfico de influencias

El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, se negó a declarar en la causa abierta contra su esposa, Begoña Gómez, que está siendo investigada por tráfico de influencias y corrupción en los negocios.

El juez instructor de la investigación, Juan Carlos Peinado, acudió al Palacio de la Moncloa, sede de la Presidencia de España, para que Sánchez respondiese sobre la causa abierta contra su esposa. La Justicia requirió al presidente socialista que testificase en calidad de testigo.

Sánchez decidió no declarar, un derecho garantizado por la Constitución española, y, por ende, no respondió a ninguna de las preguntas que le formuló el juez Peinado sobre su esposa.

Según informó AFP, el interrogatorio judicial duró unos 20 minutos, tal y como aseguraron abogados de la acusación. En cambio, la defensa de Gómez dijo que solamente fueron dos minutos de preguntas.

Sánchez se querella contra el juez Peinado

Minutos después de negarse a declarar, Sánchez, a través de la Abogacía General del Estado -órgano que concede asistencia jurídica al ente público- presentó una querella contra el juez Peinado por prevaricación, según informó el periódico El Mundo.

VOX: "Vamos a tener otro Maduro en España"

La oposición reaccionó rápidamente después de que Sánchez se acogiese a su derecho a no testificar contra su esposa.

Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular (PP) y líder de la oposición, aseguró que Sánchez "responderá ante los españoles por tantas injusticias".

Más contundente fue Santiago Abascal. El líder de VOX, partido conservador que se ha personado como acusación en la investigación contra Gómez, afirmó que el querellarse contra el juez Peinado significa "iniciar una cacería contra los jueces que se atrevan a velar por la ley". Además, dijo que, a este paso, el país va a tener "otro Maduro".

La causa contra Begoña Gómez

A mediados de abril, salieron a la luz informaciones sobre un posible caso judicial relacionado con Gómez por cometer presuntamente delitos de tráfico de influencias y de corrupción comercial. Nada más conocerse la noticia, Sánchez emitió un escrito público con el que dijo que estaba considerando dimitir como presidente del Gobierno de España.

Sin embargo, ese planteamiento que se hizo el mandatario socialista quedó en unas simples palabras y, pocos días después, compareció para decir que seguiría al frente del Gobierno de España: "Asumo la decisión de continuar con mi trabajo".

El 28 de mayo, la Justicia anunció que abría una causa contra Gómez. Una semana después, fue llamada a declarar por primera vez.

La investigación contra Gómez ha traspasado fronteras. Sánchez y su gabinete atacaron al presidente de Argentina, Javier Milei, después de que este mencionase el caso de corrupción de Gómez en alguna ocasión. Tal fue la crisis diplomática que el Gobierno de España convocó al embajador argentino para que pidiese disculpas públicas.