Pedro Sánchez, el presidente del Gobierno de España, dice que está considerando su renuncia tras estallar un escándalo de corrupción que salpica a su esposa

Pedro Sánchez, el presidente del Gobierno de España, anunció en una carta abierta a la ciudadanía que está considerando su renuncia luego de que su esposa, Begoña Gómez, se viera salpicada en un escándalo de tráfico de influencias la semana pasada.

En su misiva, Sánchez acusó a la oposición, conformada por partidos conservadores y liberales, y a los medios de comunicación de acosarlo a él y a su familia, por lo que decidió tomarse unos días para “reflexionar” si vale la pena seguir en el cargo.

“No soy un ingenuo. Soy consciente de que denuncian a Begoña no porque haya hecho algo ilegal, ellos saben que no hay caso, sino por ser mi esposa. Como soy también plenamente consciente de que los ataques que sufro no son a mi persona sino a lo que represento: una opción política progresista, respaldada elección tras elección por millones de españoles, basada en el avance económico, la justicia social y la regeneración democrática”, escribió Sánchez, quien además anunció que el próximo 29 de abril comparecerá ante la prensa y aclarará su futuro político.

“Llegados a este punto, la pregunta que legítimamente me hago es ¿merece la pena todo esto? Sinceramente, no lo sé. Este ataque no tiene precedentes, es tan grave y tan burdo que necesito parar y reflexionar con mi esposa. Muchas veces se nos olvida que tras los políticos hay personas. Y yo, no me causa rubor decirlo, soy un hombre profundamente enamorado de mi mujer que vive con impotencia el fango que sobre ella esparcen día sí y día también”.

El sorpresivo anuncio de Sánchez llega una semana después de que se revelara que el juzgado de Instrucción Número 41 de Madrid está investigando su esposa después de una denuncia presentada por el sindicato Manos Limpias, organización que acusó a Gómez de estar relacionada con al menos una empresa que recibió contratos del Estado español.

Se trata de un proceso abierto el 16 de abril llamado diligencias de investigación por la presunta comisión de los delitos de corrupción y tráfico de influencias. Sin embargo, las diligencias están declaradas secretas, según comunicó el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Gómez lleva meses dentro del ojo de la tormenta por aparentemente haber mantenido reuniones con varias empresas privadas, como Globalia y Air Europa, que después acabaron recibiendo fondos y contratos públicos del actual Gobierno español.

Sin embargo, la esposa del jefe de Gobierno español todavía no fue acusada de un delito formal y solo se sabrá si irá a juicio una vez concluya el proceso de diligencias preliminares.

En esta fase de las investigaciones, las autoridades reúnen pruebas, toman declaraciones y se realizan las pesquisas necesarias para determinar si se cometió o no un presunto delito valedero de una imputación.

Los escándalos y la inestabilidad del Gobierno de Sánchez

Sánchez, quien lleva en el cargo desde 2018, durante casi toda su carrera política ha estado inmerso en diversos escándalos que lo han llevado a convertirse en un sobreviviente político, especialmente en su rol como presidente de Gobierno.

Sin embargo, en los últimos meses, la situación ha sido más que complicada para él y su partido, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

En marzo, el Gobierno español estuvo metido de lleno en un escándalo de corrupción por la compra de mascarillas de manera ilícita en el peor momento de la pandemia del COVID-19.

El escándalo se conoció como “Caso Koldo” debido al apellido del principal apuntado por la Justicia española, Koldo García, un exasesor del círculo cercano del presidente Pedro Sánchez que se llevó suculentas comisiones de contratos fraudulentos con una empresa de material sanitario.

Koldo fue asesor y una persona de confianza de José Luis Ábalos, ministro de Fomento y secretario de Organización del PSOE entre 2017 y 2021. A su vez, Ábalos forma parte del círculo cercano de Sánchez.

La Fiscalía Anticorrupción española cree que el asesor del exministro del Gobierno español se llevó comisiones ilegales después de mediar entre empresas de mascarillas y varias Administraciones regionales afines al Gobierno durante la pandemia. Junto a Koldo, la Guardia Civil española arrestó a otras 20 personas, de las cuales 15 fueron puestas en libertad tras declarar ante las autoridades.

El caso salpicó no solo al exministro, sino también a la presidente del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, quien ejerce el tercer cargo más importante del Estado español detrás del rey y el presidente de Gobierno y fue señalada por aprobar la compra de material sanitario defectuoso.

De acuerdo con el diario El Confidencial, Armengol ejerció como presidenta del Gobierno de las Islas Baleares desde 2015 hasta 2023 y, en 2020, su administración puso el sello de calidad a un envío de mascarillas realizado por la empresa investigada en el caso Koldo, Soluciones de Gestión.

Se trataba de una operación de mascarillas valoradas en 3,7 millones de euros (aproximadamente $4 millones). El sello de calidad, según la investigación, se habría puesto cuando la Administración de Armengol sabía que el material era defectuoso.

Además de los escándalos de corrupción ligados al Gobierno, Sánchez ha enfrentado múltiples críticas y el repudio de una gran parte de la sociedad española por una polémica ley de amnistía aprobada en el Congreso español en marzo.

Esa legislación servirá para indultar a políticos de partidos separatistas catalanes que cometieron actos criminales en 2017, cuando convocaron un referéndum ilegal y proclamaron la República de Cataluña, hechos catalogados como actos terroristas por la Justicia española.