El fiscal general de Colombia sacará a su familia del país tras recibir presiones del presidente: "Temor a que sean asesinados"

Colombia se encuentra atravesando una crisis institucional muy importante y esta cuenta con el protagonismo del presidente, Gustavo Petro. Luego de presionar al fiscal general del país, Francisco Barbosa, este último tomó la decisión de llevar a su familia al exilio. El hecho fue criticado por la sociedad en general e incluso por el presidente de la Corte Suprema de Justicia.

El contexto es el siguiente: Barbosa criticó primero a Petro, incluso llamándolo "dictador", luego de que el mandatario pusiera supuestamente en riesgo la vida del fiscal delegado Daniel Hernández. No contento con esto, el fiscal general lo acusó de atentar contra "la Constitución, la Rama Judicial y la división de poderes".

Petro no se quedó de brazos cruzados y le respondió al funcionario durante una visita a España. "(Barbosa) olvida una cosa que la Constitución le ordena: yo soy el jefe de Estado, por tanto, el jefe de él". La declaración ignoró abiertamente el artículo 249 de la Constitución de 1991, que asegura que la Fiscalía “forma parte de la rama judicial y tendrá autonomía administrativa y presupuestal”.

Frente a las presiones del ejecutivo, el fiscal general tomó la decisión de sacar a su familia de Colombia. Realizó el anuncio en un acto público, donde aseguró que el mandatario "me insta a decirle que tengo que incumplir mis obligaciones constitucionales y obedecerle", y, "como no lo voy a hacer porque yo no tengo superior jerárquico en este país, me imagino que tendré consecuencias contra mi vida y responsabilizo a Gustavo Petro de lo que pueda pasar".

A su vez, confirmó que su familia saldrá del país "en los próximos días", "por temor a que sean asesinados". Barbosa agregó que "esto no es un juego que pueda tomarse a la ligera, Gustavo Petro no es un jefe de oposición, es el jefe del Estado".

La respuesta de la Corte Suprema

Fernando Castillo Cadena, presidente del supremo tribunal colombiano, defendió a Barbosa y apuntó directamente contra el presidente. Según explicó, el fiscal general "no tiene superior jerárquico" y es "un funcionario cuya misión está claramente regulada por el orden jurídico y enmarcada en la independencia del poder Judicial".

"Desconocer o malinterpretar las bases de nuestro Estado de Derecho crea incertidumbre, fragmentación e inestabilidad institucional", finalizó el magistrado.