Por si alguien lo dudaba, este lunes 15 de enero, en el día de Martin Luther King, los republicanos de Iowa lo ratificaron en los caucuses por la nominación de su partido: Donald Trump es el triunfador absoluto. La noción recurrente de que hoy por hoy el Partido Republicano es el partido de Trump quedó reafirmada en unas comicios históricos a favor del expresidente. Al momento, Trump logra un tajante 51% de los votos.
El segundo lugar, luego de horas de incertidumbre y una pugna reñida, quedó para el gobernador de Florida, Ron DeSantis, con un 21.3%; mientras que de tercero quedó la exembajadora ante la ONU, Nikki Haley.
El indomable y enérgico Vivek Ramaswamy, quien en las últimas horas sufrió un revés por los ataques del expresidente Donald Trump a su campaña, apenas logró el 7.7% —no obstante, en su discurso por el triunfo, Trump le hizo un gesto amable y felicitó a Vivek por haber surgido "de la nada".
De estos caucus de Iowa son apenas 40 los delegados que se reparten (de un total de 2,400 a lo largo del país—. Para obtener la nominación republicana, el candidato debe lograr 1,215 delegados. No obstante, aunque la cantidad de delegados de Iowa no representa ni 1% del total, esta suerte de primarias es determinante para el resto de la campaña: uno puede predecir el desempeño electoral de los candidatos. Y el mensaje de hoy ha sido rotundo.
A menos que las maniobras judiciales de los demócratas prosperen, y logren sacar a Trump del juego, todo sugiere que en noviembre de este año veremos una reedición de las elecciones del 2020: el expresidente Trump se enfrentará al presidente Joe Biden, quien por los momentos es el único candidato del Partido Demócrata.
Por los resultados, Vivek Ramaswamy abandonó la carrera por la nominación presidencial republicana. Por ahora, se mantienen en el juego tanto Ron DeSantis como Nikki Haley. En su discurso de segundo lugar, DeSantis sostuvo que sus resultados son alentadores porque los logró pese a, según él, tener todo en contra.
A lo mejor a lo que podría apuntar DeSantis, considerando los resultados de hoy, es a mantener el segundo lugar y tener una posición favorable y determinante de cara a las presidenciales. Nikki Haley, por su parte, hará lo posible para arrebatarle el puesto a DeSantis. La verdad, con los resultados de hoy, parece que Haley podría tener chance. Tuvo mejor desempeño del que muchos esperaban.
Como alguna vez puso The New Yorker en su portada, aunque de forma irónica, hasta el momento es Donald Trump, el gigante, con el resto de los candidatos como enanos tratando de permanecer prendidos de su éxito. No parece que esto cambiará pronto.
