Crisis de inseguridad: el estado de Nueva York despliega a la Guardia Nacional en la red de metro

La Administración demócrata de Kathy Hochul se ve en la obligación de recurrir a las Fuerzas Armadas para hacer frente a la crisis de seguridad que atraviesa la ciudad de Nueva York. La gobernadora anunció este miércoles que desplegará hasta 750 uniformados de la Guardia Nacional en la red de transporte metropolitano para combatir el crimen.

Junto a los 750 soldados de la Guardia Nacional, otros 300 agentes de fuerzas de seguridad del estado de Nueva York se unirán a las tareas de seguridad en la red de transporte público y en los subterráneos de la ciudad. Al frente de esta fuerza estará el mayor general Raymond Shields, quien aseguró que "los miembros de la Guardia Nacional de Nueva York siempre están dispuestos a asistir a sus colegas para garantizar la seguridad de nuestros ciudadanos".

De acuerdo con un comunicado distribuido por la Oficina de la gobernadora a las agencias, la fuerza extraordinaria concentrarán sus esfuerzos en patrullar los subterráneos del transporte público, intervenir en situaciones y realizar controles para evitar el acceso a la red de metro de individuos armados y potencialmente peligrosos.

"Nadie que se dirija a su trabajo o a visitar a su familia o a una cita con el médico debe preocuparse de que la persona sentada a su lado posea un arma mortal", sostuvo la gobernadora Hochul frente a la prensa, según recogió NBC.

La decisión de la demócrata Kathy Hochul acontece semanas después de que varios tiroteos mortales acontecieran en el interior de la red de metro de la ciudad de Nueva York. También se registraron múltiples ataques con arma blanca. En total, de acuerdo con datos recabados por AFP, este comienzo del año 2024 experimenta un aumento del 50% de crímenes violentos en el interior de la red de transporte público.

De acuerdo con NBC, la Oficina de la gobernadora prepara un nuevo paquete de medidas para hacer frente a la inseguridad en el transporte público. Entre ellas, Kathy Hochul destacó la posibilidad de dar poder a los jueces para expulsar definitivamente a los individuos violentos de la red de metro. Si un individuo es declarado culpable de perpetrar una agresión en el interior de la red de transporte público, la Justicia podría tomar medidas para evitar que esa persona vuelva a usar la red metropolitana.