La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, fue golpeada la tarde de este viernes en un mercado de Kultorvet, ubicado en el casco viejo de Copenhague. Este violento incidente ocurre apenas dos días antes de las elecciones de la Unión Europea en Dinamarca.

En un comunicado de prensa, la oficina de la primera ministra informó que Frederiksen se encuentra "conmocionada" por el ataque, pero no ofreció más comentarios al respecto. Las autoridades han confirmado que el agresor fue detenido inmediatamente por la policía, aunque no han proporcionado más detalles sobre el incidente.

Tras el ataque, el vicepresidente y ministro de Defensa, el liberal Troels Lund Poulsen, expresó su sorpresa y consternación en la red social X: "Oh, no (…) así no es Dinamarca. No atacamos a nuestros primeros ministros. Le envío mis mejores pensamientos a Mette".

Líderes de los principales partidos daneses y otros políticos de la región han reaccionado en redes sociales, condenando el ataque y enviando mensajes de apoyo a Frederiksen. “Absolutamente horrible. Esto debe condenarse en los términos más enérgicos”, expresó Tobias Billström, ministro de Asuntos Exteriores de Suecia.

La violencia política ha sido un tema recurrente durante la campaña electoral en toda Europa, con varios incidentes preocupantes que subrayan la creciente tensión. En Eslovaquia, el primer ministro Robert Fico está recuperándose de un intento de asesinato perpetrado por un hombre armado. Por su parte, en Alemania, el eurodiputado socialdemócrata Matthias Ecke fue golpeado mientras hacía campaña.

En otro incidente reciente, un político del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania fue apuñalado el pasado martes en Mannheim, evidenciando un patrón de ataques a figuras políticas de alto perfil.