Dominar el deporte mundial, la última obsesión de Qatar y Arabia Saudí

Qatar y Arabia Saudí han visto en el deporte la última de sus rivalidades por ver quien tiene una mayor influencia política y económica en la región del golfo Pérsico.

A través de adquisiciones de equipos, patrocinios o celebración de los eventos deportivos más importantes del mundo. Esta es la manera con la que Arabia Saudí y Qatar tratan de imponerse el uno sobre el otro. Y hay que decirlo: el dinero que generan con la venta de petróleo ha hecho posible que ambos países centren sus esfuerzos económicos en el deporte. Gracias a él, han modernizado sus ciudades y sus infraestructuras, lo que ha llevado a que su imagen en el exterior sea más atractiva para convencer a los mejores deportistas o para convencer a las instituciones internacionales de que celebren competiciones dentro de las fronteras qataríes o saudíes.

El fútbol europeo, la gran obsesión

Concretamente, el fútbol es el deporte que acapara las inversiones más elevadas realizadas por Qatar y Arabia Saudí. Son varias las compras de equipos por parte de miembros de la realeza de los dos países o acaudalados empresarios. En 2011, Qatar Investment Authority, fondo de inversión público del emirato qatarí, se hizo con el 70% de las acciones del Paris Saint-Germain. El gran objetivo de la inversión fue aupar al equipo francés hasta lo más alto del fútbol continental y conquistar la UEFA Champions League. Doce temporadas después, ese sueño aún no se ha cumplido, pese al millonario gasto en fichajes que han empleado verano tras verano, trayendo a jugadores como Leo Messi o Neymar.

Qatar también se interesó en el fútbol español. Abdullah ben Nasser Al Thani, miembro de la realeza, adquirió el Málaga CF en 2010. Al principio, la operación dio sus frutos. El equipo llegó a clasificarse para las semifinales de la UEFA Champions League. Pero año tras año, este modesto conjunto comenzó a caer. Tanto que este año se ha consumado su descenso a la tercera división de España.

Desde Riad también se está impulsando la inversión en el fútbol europeo. En 2021, el Fondo Soberano de Inversión Pública saudí compró el 80% del accionariado total del Newcastle United de la Premier League inglesa, convirtiéndose en el combinado más rico del panorama futbolístico. En dos temporadas, el dinero saudí ha devuelto al equipo a la UEFA Champions League, competición que disputará 21 temporadas después. El Sheffield United, que jugará en la máxima categoría del fútbol inglés la próxima temporada, también figura entre las propiedades de la monarquía de Arabia Saudí, igual que el Châteauroux francés y el Beerschot FC de Bélgica. En España, Turki Al-Sheikh, asesor de la realeza, se convirtió en el máximo accionista del UD Almería.

Cristiano Ronaldo, la joya de la corona saudí

La apuesta de Arabia Saudí por el fútbol también involucró a su propio campeonato. A pocos días para que concluyese el año 2022, , dando un golpe encima de la mesa del panorama futbolístico mundial. Su llegada a una competición tan exótica como la saudí supone para la estrella portuguesa un beneficio de 500 millones de dólares, cantidad que ganará durante las dos temporadas y media que vista la camiseta del equipo. Este acuerdo no pudo darse sin el respaldo económico del Fondo Soberano de Inversión Pública del país, que dotó del dinero suficiente al Al Nassr para ejecutar la operación.

Nada acostumbrados a ver una figura semejante como la de Cristiano Ronaldo jugando en su campeonato, los saudíes le recibieron por todo lo alto. Nunca antes vimos una presentación como la que le prepararon Arabia Saudí y los seguidores del Al Nassr a su llegada. CR7 llegó en un convoy de carros de alta gama al estadio Mrsool Park, donde le esperaba un espectáculo lleno de luces, fuegos artificiales y miles de aficionados emocionados por ver a su nueva estrella.

Su primera temporada no ha resultado como esperaba. Las aspiraciones del Al Nassr con Cristiano Ronaldo en su roster son las de ganar el campeonato temporada tras temporada. Este año, han terminado en segunda posición. Por cierto, a día de hoy, es el deportista mejor pagado del mundo.

Otro fichaje que se materializó fue el de Karim Benzema. Quien ha sido uno de los líderes del Real Madrid en la última década firmó con el Al Ittihad, campeón de la liga saudí, un contrato de dos temporadas más otra opcional a razón de unos 100 millones de dólares por cada una.

Un Mundial para 'abrirse al mundo'

En diciembre de 2010, la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) designó a Qatar para la celebración del Mundial de 2022. Fue la primera vez en la historia que un país de mayoría musulmana acogía el que probablemente es el torneo futbolístico más mediático del planeta. Aquel nombramiento fue más que polémico: instituciones, personalidades y patrocinadores rechazaban la elección alegando que en el país no se respetan ciertos derechos fundamentales. Incluso salió a la luz el conocido como Caso Qatargate, una trama de corrupción que involucraba a la alta plana de la FIFA por unas irregularidades en la designación. También se tuvo que cambiar las fechas en las que se compite debido a las altas temperaturas (cada edición suele celebrarse entre junio y julio; esta se pasó a noviembre y diciembre).

Todo quedó al margen y finalmente el Mundial de 2022 se celebró en Qatar. Desde el momento en el que fue nombrado anfitrión, el país puso en marcha la maquinaría necesaria: modernización de infraestructuras, construcción de nuevos estadios, etc. Todo gracias a una astronómica inversión de las instituciones del emirato. Acoger este evento supuso una oportunidad única de 'abrirse al mundo' y limpiar su imagen.

Lo cierto es que el Mundial se disputó con total normalidad, sin ningún incidente importante. La Selección de Argentina se proclamó campeona tras imponerse a Francia en la final en la tanda de penaltis.

LIV Golf: mejores premios que en el PGA Tour

Dejamos los estadios de fútbol y viajamos al green. En 2022, el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí patrocinó la fundación del LIV Golf, un nuevo gran circuito de golf para rivalizar con el PGA Tour. Su director ejecutivo es el exgolfista australiano Greg Norman.

Para imponerse al principal circuito de golf norteamericano, Arabia Saudí atrajo a varios de los mejores golfistas como el estadounidense Dustin Johnson o el español Sergio García. También ofrece premios económicos más altos que el PGA Tour.

En su primera temporada, el LIV Golf realizó ocho campeonatos: Londres (Reino Unido); Portland, Boston, Miami, Bedminster y Chicago (Estados Unidos); Bangkok (Tailandia); y Yeda (Arabia Saudí).

Desde hace tiempo, el LIV Golf ha estado envuelto en un conflicto de intereses con el PGA Tour y con el DP World Tour. Una pelea que conllevó a demandas interpuestas entre todas las partes. Finalmente, los tres circuitos alcanzaron un acuerdo para unificarse e impulsar el golf y, así, finiquitar los problemas en los que estaban envueltos.

Pasión por el motor

Qatar y Arabia Saudí acogen dos Gran Premio (G.P.) de Fórmula 1 y de MotoGP, las dos categorías más importantes tanto de automovilismo como de motociclismo. También el Rally Dakar.

Comenzando por la Fórmula 1, en 2021 se celebró la primera edición del G.P. de Arabia Saudí. El circuito de la Corniche de Yeda, situado en la ciudad de Yeda, es el escenario de la carrera. Se trata de un trazado urbano, similar a otros G.P. como el de Mónaco (Mónaco) o el de Bakú (Azerbaiyán). Ese mismo año fue en el que se inauguró el G.P. de Qatar de F1. En su caso, se disputa en el Circuito Internacional de Lusail, situado a unas 17 millas de Doha.

Este mismo circuito es el que acoge el G.P. de Qatar de MotoGP, que se celebra desde 2008. En el caso de Arabia Saudí, aún no acogió una carrera de esta disciplina, aunque sí lo hará en un futuro después de que este año se firmase el acuerdo. Es en el desierto saudí donde se disputa, desde 2020, el Rally Dakar, la prueba más exigente del mundo.

Juegos Asiáticos de Invierno en Arabia Saudí, ¿y unos futuros Juegos Olímpicos en Qatar?

Arabia Saudí es el destino donde se celebrarán los próximos Juegos Asiáticos de Invierno. La fecha es 2029. Así lo determinó el Consejo Olímpico Asiático (COA) en su asamblea general celebrada en octubre de 2022. Esta competición, que aglutina deportes de invierno como el esquí o el snowboard, es 'una versión reducida' de los Juegos Olímpicos de Invierno, ya que sólo acuden profesionales asiáticos.

Es llamativo que el COA decidiese dar esta oportunidad a Arabia Saudí, sabiendo que es un país que pasa largas temporadas sin nevar. El evento se celebrará en un complejo futurista que se está construyendo en la ciudad de Neom.

Acoger los Juegos Olímpicos es el gran deseo del emirato catarí en estos momentos. El país ya intentó convertirse en la sede hasta en tres ocasiones, sin fortuna alguna. El Mundial de 2022 es su carta de presentación para tratar de convencer al Comité Olímpico Internacional (COI) y a la comunidad internacional de que tienen los recursos necesarios para ser la sede. Su próximo intento será para la edición de los Juegos Olímpicos de 2036.