Mike Johnson, contra las cuerdas

La situación de Mike Johnson como speaker en la Cámara de Representantes está en un punto crítico como consecuencia de sus compañeros de partido. La debilidad númerica de la mayoría conservadora y, sobre todo, la distancia ideológica entre las diferentes corrientes dentro del GOP le llevaron a perder dos importantes batallas legislativas el pasado miércoles, cada una de ellas provocada por uno de los extremos. Mientras que cuatro congresistas moderados tumbaron el impeachment a Alejandro Mayorkas, 14 miembros del Freedom Caucus hicieron lo propio con una resolución de ayuda exclusiva a Israel sin vinculación con la frontera o Ucrania.

Coordinar posiciones tan distantes como las de Ken Buck o Marjorie Taylor Greene

Johnson fue consciente desde el momento de su elección de que le esperaba un arduo camino tratando de coordinar los esfuerzos de personalidades tan dispares y alejadas ideológicamente como Ken Buck o Marjorie Taylor Greene, pero parecía ser la persona capaz de conseguirlo. Sus primeros pasos parecieron calmar las aguas entre las distintas facciones y el GOP de la Cámara Baja tuvo varias votaciones de manera pétrea.

El acuerdo con los demócratas para evitar el cierre de Gobierno, primera fisura

Las cosas comenzaron a torcerse en noviembre, cuando Johnson llegó a un acuerdo con los demócratas para evitar el cierre de Gobierno por falta de financiación. La tramitación en el pleno fue un auténtico reto para el flamante presidente del congreso, que necesitó del apoyo de los representantes demócratas para salir adelante. La votación final fue de 336 votos a favor frente a 95 en contra. El respeto del ala más conservadora hacia Johnson sufrió una importante fisura, a pesar de que el propio Johnson era considerado dentro de esta facción.

Rebelión del Freedom Caucus

El mismo asunto llevó el problema a un nivel mayor en enero, provocando el castigo del Freedom Caucus contra su speaker, llegando a bloquear la aprobación de varios proyectos de ley en represalia por el visto bueno a una nueva resolución continua que evitaba un nuevo cierre de Gobierno por el gasto. En esta ocasión, las críticas arreciaron y el propio Johnson tuvo que salir al paso de los rumores asegurando que no sentía que su puesto estaba en peligro. En este caso, fueron 108 los votos discordantes, 106 de ellos republicanos. Para hacerse una idea de la división, fueron 107 los congresistas conservadores que apoyaron al speaker y a los demócratas para sacar adelante la norma.

Tras anunciarse el acuerdo, días antes de la votación, y como medida de presión, hasta 13 congresistas republicanos tumbaron varias medidas de su propio partido. Incluso alguno de los congresistas, como Warren Davidson llego a explotar y salir de una reunión interna rugiendo que Johnson "nunca debería haber sido contratado" para el puesto que ocupa. El presidente del Freedom Caucus en la Cámara, Bob Good, llegó a decir que el pacto con los demócratas "era inaceptable".

Cuatro legisladores moderados tumban el Impeachment a Mayorkas

La situación se complicó aún más el pasado miércoles, al abrirle varios congresistas moderados un nuevo y especialmente doloroso frente: el "no" al impeachment a Alejandro Mayorkas, que permitió al secretario de Seguridad Nacional sobrevivir al juicio político por apenas dos votos -de hecho la primera votación acabó en empate a 215- y que llegó a provocar un rifirrafe entre los conservadores en medio del hemiciclo. En esta ocasión, Ken Buck, Mike Gallagher, Tom McClintock y Blake D. Moore acusaron a sus compañeros de bancada de pretender "abrir la caja de Pandora" al rebajar el nivel para tratar de destituir a un miembro del Gabinete.

Por si fuera poco, el Freedom Caucus volvió a recordarle a Johnson su debilidad al tumbar junto a los demócratas una iniciativa para entregar un paquete de ayuda a Israel desvinculado de las negociaciones por la frontera y Ucrania.

Johnson se siente fuerte

No obstante, Johnson anunció que seguirá trabajando para conseguir sacar adelante políticas conservadoras y contribuir a ampliar la mayoría de cara a las elecciones de noviembre. De hecho, garantizó que conseguirá sacar adelante el impeachment a Mayorkas.