Rubio es uno de los favoritos de Trump y esta semana volvió a demostrar por qué

En una entrevista reciente, al preguntarle quién podría sucederlo, el presidente Trump mencionó tanto a J.D. Vance como a Marco Rubio. No es de extrañar: la habilidad política del floridiano ha estado resolviendo grandes problemas para la Administración. La semana pasada, la rápida actuación del secretario Rubio respecto a la licencia de Chevron para importar petróleo venezolano ayudó a evitar un revés político que podría haber descarrilado el "gran y hermoso proyecto de ley" que es fundamental para la agenda de Trump.

El secretario de Estado salvó el megaproyecto del presidente Trump y ha dado un duro golpe a la tiranía de venezuela, frenando el flujo de miles de millones de dólares hacia un régimen que financia a grupos criminales como el Tren de Aragua y los usa como herramienta de guerra asimétrica para desestabilizar a este país.

Algunas figuras muy relevantes del movimiento MAGA estuvieron durante las últimas semanas impulsado la renovación de la licencia de Chevron para importar petróleo de Venezuela. Como lo reveló el New York Post, el enviado especial Ric Grenell incluso viajó a Antigua en un jet privado, y logró la liberación de un americano secuestrado por el régimen de Nicolás Maduro, y al parecer intentó usar ese logro para impresionar al presidente y alcanzar un triunfo para Chevron. No lo logró.

El secretario Rubio, que conoce Latinoamérica como ningún otro secretario de Estado en la historia, intervino para evitar lo que habría sido un colosal error. El “grande y hermoso proyecto de ley” del presidente Trump es fundamental para cumplir con las promesas de campaña y para asegurar además el financiamiento del Gobierno. Si Grenell hubiera logrado impresionar a Trump y extender la licencia a Chevron, probablemente el proyecto de Trump no hubiera pasado en la Cámara.

Tres congresistas republicanos, cubano americanos, que conocen perfectamente la situación que vive Venezuela y lo contraproducente que es para Estados Unidos fortalecer a la tiranía venezolana a través del dinero de Chevron, probablemente habrían votado en contra del proyecto si se extendía la licencia. Según un reporte de Axios ya en la primera votación los congresistas habían dejado claro que su apoyo dependía de que no se renovara esa licencia.

No es una exageración decir que el secretario Rubio salvó el "grande y hermoso proyecto de ley” cuando desde su cuenta personal posteo, horas antes de la votación en la Cámara, diciendo que la licencia de Chevron efectivamente llegaría a su fin el 27 de mayo. ¡Eso sí que es poner a América primero, en vez de Chevron primero!

En adición a ese gran logro, no renovar la licencia de chevron significa darle un fuerte golpe a una tiranía enemiga de Estados Unidos. La tiranía socialista de venezuela recibe alrededor de 400 millones de dólares al mes por cuenta de los negocios con Chevron.

La verdad es que si alguien conoce bien el problema de la expansión China en la región es el secretario Rubio, quien lleva años alertando al respecto, y que como buen conocedor del tema sabe que la solución no es premiar al régimen venezolano con miles de millones de dólares, sino lo contrario: imponer sanciones.

El secretario Rubio se ha ganado la confianza del presidente Trump, y cada vez es más claro por qué.