Irán: un periodista iraní-estadounidense se suicidó en protesta contra la represión del régimen
Kianoosh Sanjari anunció en las redes sociales que se quitaría la vida si las autoridades no liberaban a cuatro presos políticos.
El periodista iraní-estadounidense Kianoosh Sanjari (42), un fuerte crítico del régimen de Irán y activista de derechos humanos, se suicidó este miércoles en Teherán, capital del país persa, en protesta contra la brutal represión del Gobierno islámico, encabezado por el Alí Jamenei, líder supremo iraní.
El hecho ocurrió después de que Sanjari anunciara en las redes sociales que se quitaría la vida si las autoridades iraníes no liberaban a cuatro presos políticos.
“Si Fatemeh Sepehri, Nasrin Shakarami, Toomaj Salehi y Arsham Rezaei no son liberados de prisión antes de las 19:00 horas de hoy, miércoles, y la noticia de su liberación no se publica en el sitio web de noticias judiciales, me quitaré la vida en protesta contra la dictadura de Jamenei y sus socios. ¡Quizás sea una maniobra desesperada! ¡Larga vida a Irán!”, expresó Sanjari en la red social X.
Después de que expirara el ultimátum, Sanjari publicó una foto tomada por él desde un puente en Teherán, acompañada de un mensaje que rezaba: “Son las 7 de la tarde, puente Hafez”.
۷ شب، پل حافظ، چهارسو pic.twitter.com/xBXjJ5gFpF
— Kianoosh Sanjari (@Sanjaribaf) November 13, 2024
Luego, compartió su última publicación en X. “Una promesa significa lealtad. Nadie debería ser encarcelado por expresar sus opiniones. La protesta es un derecho de todos los ciudadanos iraníes. Mi vida terminará después de este tuit, pero no olvidemos que moriré por amor a la vida, no a la muerte. Deseo que un día los iraníes despierten y superen la esclavitud. Larga vida a Irán”, escribió.
Fuentes iraníes confirmaron el fallecimiento del periodista horas más tarde.
Un periodista perseguido por el régimen
Sanjari fue encarcelado en reiteradas ocasiones entre 1999 y 2007, año en el que huyó a Noruega, donde trabajó con organizaciones de derechos humanos.
Luego emigró a Estados Unidos, donde trabajó como periodista en Voice of America.
En 2016, Sanjari regresó a Irán para estar con su madre enferma. Luego fue sentenciado a seis años de prisión y fue liberado después de cumplir la mayor parte de su condena.
Repercusiones tras la muerte de Sanjari
Los medios de comunicación en idioma persa que se encuentran fuera de Irán y Reza Pahlavi, líder iraní en el exilio, lamentaron la muerte de Sanjari, a quien elogiaron por su trabajo y activismo.
Pahlavi, quien emitió una declaración a través de un video compartido en las redes sociales, advirtió que otras vidas podrían perderse por culpa del régimen de los ayatolás.
BREAKING:
— Shayan X (@ShayanX0) November 13, 2024
Iran’s exiled Shah and national leader, His Majesty @PahlaviReza, released a message of unity to his nation, addressing the death of Iranian journalist Kianoosh Sanjari and the Islamic regime's threat to execute six protesters.#KingRezaPahlavi pic.twitter.com/lpgrTKQPhK
Algunos internautas manifestaron que Sanjari no se había suicidado y acusaron al régimen de asesinarlo o de haberlo presionado para que se suicidara.
¿Quiénes son los presos políticos que Sanjari exigía liberar?
El periódico israelí Jerusalem Post indicó que los presos políticos que Sanjari exigía liberar eran Fatemeh Sepehri, una activista por los derechos de las mujeres que fue condenada a prisión en junio pasado por “apoyar a Israel” después de condenar la masacre del 7 de Octubre; Nasrin Shakarami, madre Nika Shakarami, una manifestante asesinada durante una protesta antigubernamental en 2022, que fue arrestada en octubre del corriente año; Toomaj Salehi, un rapero que fue condenado a prisión en julio de 2023 por participar en las manifestaciones de 2022; y Arsham Rezaei, un activista que fue detenido anteriormente por hacer “propaganda contra el régimen” e “insultar al liderazgo”.