La violencia política en México cobra otra víctima: asesinan a un segundo alcalde en menos de 10 días
El Gobierno mexicano ha sido criticado por no garantizar la seguridad en las regiones afectadas por la violencia política.
Román Ruíz Bohórquez, alcalde del municipio de Candelaria Loxicha, en el sur de México, fue asesinado este martes por atacantes no identificados, lo que ha encendido las alarmas sobre la creciente violencia política en el país. Este crimen ocurre solo 10 días después de otro asesinato en la región, subrayando la preocupante tendencia de ataques contra funcionarios públicos en el sur de México.
El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, confirmó el asesinato a través de sus redes sociales y aseguró que la Fiscalía estatal ya investiga el caso, prometiendo que las autoridades harán todo lo posible para evitar que este crimen quede impune. "Lamentamos este hecho y enviamos nuestro más sentido pésame a sus familiares", expresó.
Contexto de la violencia política en México
El asesinato de Ruíz Bohórquez no es un incidente aislado. El pasado 6 de octubre, Alejandro Arcos, alcalde de Chilpancingo, en el vecino estado de Guerrero, fue brutalmente asesinado. Ambos homicidios destacan un patrón alarmante en el sur de México, donde la violencia contra figuras políticas está en aumento.
Este tipo de violencia ha sido especialmente visible desde las elecciones de junio de 2023, que fueron las más violentas en la historia reciente del país. Más de 30 candidatos fueron asesinados durante el proceso electoral, según organizaciones civiles, aunque el Gobierno solo ha reconocido 12 casos. Estos asesinatos han generado un ambiente de miedo e incertidumbre tanto para políticos como para la población.
Reacciones y consecuencias
Ruíz Bohórquez, además de ser alcalde, era profesor en la Universidad Autónoma Comunal de Oaxaca, una institución que lamentó profundamente su muerte en un comunicado: "La comunidad que hoy está de luto comunitario. Que tu camino sea bendecido, querido maestro, compartiste con nosotros no solo la visión de una vida en común más digna para todos y todas, sino que nos acompañaste con claridad y orientación para seguir con este proyecto", expresó la universidad.
El Gobierno mexicano ha sido criticado por no garantizar la seguridad en las regiones afectadas por la violencia política. Este nuevo asesinato aumenta la presión sobre las autoridades para que implementen medidas más efectivas en estados como Oaxaca y Guerrero, donde los enfrentamientos entre grupos criminales, autoridades locales y comunidades son frecuentes.
Implicaciones más amplias
La violencia política en México refleja una serie de tensiones subyacentes, como la influencia de los cárteles de la droga y las disputas por el control político en áreas vulnerables. Este tipo de asesinatos no solo afecta a las comunidades locales, sino que también pone en duda la estabilidad y la seguridad en el país en su conjunto, a medida que la violencia sigue afectando el panorama político mexicano.