Irán acusa a Israel de ser el autor de la explosión de beepers en el Líbano y perpetrar una "masacre"

El régimen islamista de Irán acusó a Israel de haber llevado a cabo "una masacre" al hacer explotar los beepers usados por los integrantes del grupo terrorista Hezbolá en el Líbano. Las autoridades del país reportaron al menos nueve muertos y en torno a 3.000 heridos, 200 de ellos de gravedad.

En declaraciones recogidas por AFP, Naser Kanani, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, definió el ataque electrónico supuestamente cometido por el Gobierno de Benjamin Netanyahu como una "masacre", calificándolo, además, de "acto terrorista perpetrado por el régimen sionista".

Hezbolá también responsabilizó a Israel del ataque, añadiendo que se trata del "mayor fracaso de contrainteligencia" que el grupo terrorista "ha tenido en décadas".

Por el momento, nadie ha confirmado ser el autor del ataque.

Hezbolá seguirá atacando a Israel

Al margen de acusar al Gobierno de Netanyahu, Hezbolá confirmó que continuará atacando a los israelíes y seguirá combatiendo dentro de la Franja de Gaza.

"La resistencia islámica en Líbano continuará, como en todos los días anteriores, sus operaciones para apoyar a Gaza, su pueblo y su resistencia, y para defender a Líbano, su pueblo y su soberanía", señaló el grupo terrorista, en un comunicado recogido por AFP.

Además, Hezbolá prometió "un duro ajuste de cuentas" contra Israel por considerarles como el autor de la "masacre" en el Líbano.

¿Qué son los beepers? ¿Cómo explotaron?

Los beepers son unos pequeños dispositivos portátiles que servían para que las personas se comunicasen antes de la irrupción de los celulares y las redes sociales. Cuando comenzaron a fabricarse, su tamaño era mayor, aunque los fabricantes fueron reduciendo sus dimensiones según iban popularizándose.

Estos aparatos solían llevarse dentro del bolsillo o enganchado en el cinturón. Si alguien quería ponerse en contacto con el dueño de un beeper, debía llamar a un centro, donde era atendido por un operador, y dejar un mensaje y un número de teléfono. Desde ese centro se enviaba el mensaje al dispositivo de destino, que emitía un pitido y mostraba dicho mensaje en una pequeña pantalla.

Según fuentes del grupo terrorista en declaraciones recogidas por el Wall Street Journal, el autor del ataque introdujo en los beepers un "software malicioso" que podría haber sido el causante de la masiva explosión. Las baterías alcalinas o de litio que portan necesitan ser reemplazadas cada cierto tiempo, por lo que aquellas que ya estuvieran en mal estado ayudó a potenciar los estallidos.