A pesar de las advertencias de los expertos en seguridad por lo que consideran una situación delicada, el Pentágono le restó importancia a la llegada de buques de guerra rusos a Cuba, con funcionarios estadounidenses asegurando que se trata de una operación que no irá más allá de “una visita de rutina”.

En la rueda de prensa de este miércoles, la portavoz del Pentágono Sabrina Singh aseguró que la llegada de la flotilla naval rusa a La Habana no representa una amenaza para Estados Unidos ya que esta situación ha ocurrido en múltiples ocasiones a lo largo de los años.

Sin embargo, la funcionaria reconoció que los activos militares estadounidenses habían estado siguiendo a los barcos rusos en su camino a Cuba junto con la ayuda de aliados internacionales.

"Hemos estado siguiendo los planes de los rusos para esto", dijo Sabrina Singh, subsecretaria de prensa del Pentágono.

De acuerdo con ABC News, el tránsito de los barcos de guerra rusos hacia Cuba fue vigilado por seis buques de guerra de la Armada de Estados Unidos, Canadá y Francia.

“Entre ellos se encontraban los destructores de la Armada estadounidense USS Donald Cook, USS Delbert Black, USS Truxton, el guardacostas estadounidense Stone, la fragata canadiense HMCS Ville de Quebec y una fragata francesa de la clase Lafayette”, se lee en el reporte del medio.

Singh también explicó que Estados Unidos siempre vigilará los buques extranjeros que operen cerca de aguas territoriales del país, aunque no los consideren una amenaza.

"No es una sorpresa, ya los hemos visto hacer este tipo de escalas antes y son visitas navales rutinarias que hemos visto bajo diferentes administraciones", dijo la funcionaria. "Siempre vamos a vigilar constantemente cualquier buque extranjero que opere cerca de las aguas territoriales de Estados Unidos".

No obstante, a pesar de que Estados Unidos le está restando importancia a los buques de guerra rusos, algunos expertos en seguridad consideran que Moscú está mostrando músculo a Washington de forma provocadora.

Rebekah Koffler, analista de inteligencia estratégica, dijo que Putin podría buscar posicionarse cerca de Estados Unidos en un momento de crecientes tensiones luego de que Biden autorizara a Ucrania utilizar armamento estadounidense de largo alcance para atacar en territorio ruso.

"Si algo sale mal y Ucrania ataca objetivos críticos en Rusia, los militares rusos podrían permitir a los cubanos atacar objetivos dentro de Estados Unidos o intereses estadounidenses", afirmó Koffler.

Benjamin Gedan, director del programa para América Latina del Wilson Center, también opinó sobre el movimiento de Rusia: “Los buques de guerra son un recordatorio para Washington de que es desagradable cuando un adversario se entromete en el extranjero cercano”.