El Partido Comunista chino instó a los tiktokers estadounidenses a oponerse a la ley contra la plataforma. La respuesta fue masiva. Imagine si difundiera otros mensajes propagandísticos, como el abandono de Taiwán.

Ayer, 13 de marzo, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó la Ley de Protección de Solicitudes Controladas por Adversarios Extranjeros por 352 votos contra 65, y sólo un "presente". Fue una victoria para Estados Unidos.

El proyecto de ley HR 7521 exige la "qualified divestiture" (o desinversión calificada) en 180 días de cualquier empresa controlada por un adversario extranjero si así lo determina el presidente. La propuesta menciona como ejemplo a TikTok, una aplicación muy popular para compartir videos, y a su matriz china, ByteDance Ltd.

La iniciativa también establece que el presidente puede designar a ciertas aplicaciones como "sujetas al control de adversarios extranjeros", por tanto cubiertas por la regla de desinversión. Si en 180 días no se cumple con la desinversión, la legislación prohíbe que las tiendas de aplicaciones y los servicios de alojamiento web estadounidenses proporcionen la aplicación al público.

Los defensores de la legislación quieren asegurarse de que TikTok no pueda enviar datos de sus 170 millones de usuarios estadounidenses a China. El director ejecutivo de la plataforma, Shou Chew, ha negado repetidamente que su aplicación lo haya hecho alguna vez. El 31 de enero, por ejemplo, le dijo al Comité Judicial del Senado que la aplicación "nunca proporcionó" datos a China. Sin embargo, diversos informes, incluido un artículo de BuzzFeed News, dejan claro que las numerosas garantías de Chew son falsas.

Como informó el Wall Street Journal esta semana, los opositores al proyecto de ley sostienen que TikTok había tomado medidas para garantizar que "todos los datos de los usuarios estadounidenses se almacenasen en la nube de Oracle, no en el extranjero, y que los temores eran exagerados". El arreglo con Oracle, conocido como Proyecto Texas, no se implementó completamente y tiene fallas desde su concepción.

El Proyecto Texas aborda sólo una de las dos amenazas a la seguridad nacional que plantea la plataforma más poderosa de la historia. "El mundo nunca había visto una red social que se difundiera tan salvajemente -ni un algoritmo que anticipara tus deseos con mayor precisión- como TikTok", escribió Axios en marzo de 2022.

El Partido Comunista Chino movilizó, valiéndose de engaños, a los usuarios estadounidenses de la plataforma para que se pusieran en contacto con sus representantes electos y les pidieran bloquear la legislación de la Cámara.

Si usted tiene TikTok en un dispositivo, obtendrá lo que el Partido Comunista de China (PCC) quiere que vea. El régimen chino ha utilizado su algoritmo para difundir desinformación pro-Hamás, narrativas rusas sobre la guerra de Ucrania y otra propaganda pro-PCC. Los comunistas también usan la aplicación para tratar de destruir a los jóvenes estadounidenses, inundándolos con mensajes que promueven el uso de drogas ilegales, la autolesión e incluso el suicidio. Como dijo a Gatestone el analista de seguridad nacional Paul Dabrowa, radicado en Australia, el algoritmo "exacerba los problemas de salud mental de los adolescentes estadounidenses y les hace odiar la democracia".

"El Partido Comunista Chino emplea TikTok como un caballo de Troya para infiltrarse, hacer propaganda y subvertir a Estados Unidos", me dijo este mes Kerry Gershaneck, autor de Political Warfare: Strategies for Combating China's Plan to 'Win Without Fighting'.

No hay duda de que TikTok es poderoso. Este mes, el Partido movilizó, valiéndose de engaños, a los usuarios estadounidenses de la plataforma para que se pusieran en contacto con sus representantes electos y les pidieran bloquear la legislación de la Cámara. La respuesta fue masiva. Imagínese si TikTok, en circunstancias diferentes, impulsara otros mensajes políticos pro-China, como instar al abandono de, digamos, Taiwán.

Beijing incluso ha permitido que TikTok se utilice para trucos políticos sucios. Los partidarios de Joe Biden, candidato presidencial en ese momento, utilizaron la red social para interrumpir eventos de campaña de Trump, al menos uno en Tulsa en junio de 2020.

La Evaluación Anual de Amenazas de la Comunidad de Inteligencia de EEUU de 2024, publicada por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional el día 11 de este mes, informa que China también utilizó la aplicación para interferir en las elecciones de mitad de período de 2022. En una comparecencia al día siguiente, la directora de Inteligencia Nacional, Avril Haynes, dijo que no podía descartar que el Partido Comunista Chino utilizara TikTok en las próximas elecciones.

El Partido Comunista de China no tiene ningún derecho constitucional a atacar a Estados Unidos.

China incluso ha convertido a TikTok en un arma. El PCC libra lo que llama "guerra sin restricciones" contra Estados Unidos. La frase "guerra sin restricciones" es más que adecuada. Radio Free Asia informó en agosto de 2020 que una unidad de inteligencia del Ejército Popular de Liberación, que trabajaba en el ahora cerrado consulado de China en Houston, estaba utilizando big data para identificar a los estadounidenses que probablemente participarían en las protestas de Black Lives Matter y Antifa y luego enviarles videos "hechos a medida" sobre cómo organizar protestas. Informes relacionados revelan que los videos fueron distribuidos por TikTok. Fomentar la violencia callejera en otro país es un acto de guerra.

¿Qué importancia tiene el algoritmo de TikTok para el régimen chino? El presidente Donald Trump intentó forzar la venta de la aplicación a Oracle en 2020. El acuerdo fracasó no por el precio, sino por el control del algoritmo.

Primera Enmienda

Voces poderosas se han pronunciado en contra de la acción anti-TikTok del Congreso, en particular el senador Rand Paul (R-KY). El 8 de marzo señaló que se oponía a la legislación por motivos constitucionales "¿Por qué, simplemente, no defendemos la Primera Enmienda?". Maria Cantwell (D-Wash), quien como presidenta del Comité de Comercio del Senado considerará el proyecto de ley, dijo que "trataría de encontrar un camino a seguir que sea constitucional y proteja las libertades civiles".

El proyecto de ley, sin embargo, no viola la Primera Enmienda. Por supuesto que las personas que crean y publican videos tienen derecho a las protecciones constitucionales, pero el Congreso no está tratando de regular lo que aparece en la aplicación. Como han señalado el comisionado de la FCC, Brendan Carr, y otros, el proyecto de ley de TikTok regula la conducta de ByteDance y TikTok. No regula el contenido que se publica.

Algunos se han quejado de que el proyecto delega demasiado poder en el presidente, pero la Constitución otorga al comandante en jefe amplios poderes para proteger a Estados Unidos de adversarios y enemigos extranjeros. Además, contiene salvaguardias que limitan los poderes discrecionales del presidente. En síntesis, el Partido Comunista de China no tiene ningún derecho constitucional a atacar a Estados Unidos.

En agosto de 2020, el presidente Trump -hay que reconocerlo- invocó la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional de 1977 para prohibir TikTok. El presidente Biden revocó la prohibición y su equipo de campaña para la reelección, llamado Biden HQ, se unió a la plataforma de propiedad china el mes pasado. El Comité Nacional Demócrata había hecho lo mismo en marzo de 2022. Ahora ni siquiera a Trump le gusta el intento de deshacerse de la aplicación: el expresidente señaló su oposición en un mensaje de Truth Social.

Sin embargo, es hora de sacarle TikTok a China. Recordemos que el régimen comunista ha utilizado TikTok de forma maliciosa, como se muestra en el informe de Radio Free Asia mencionado anteriormente.

© Gatestone Institute