Activismo LGBTI, óperas trans y otros gastos sin sentido de USAID, la agencia que Musk quiere cerrar

La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) cerró sus oficinas este 3 de febrero en Washington D.C., después de que Elon Musk, quien dirige el Departamento de Eficiencia Gubernamental, tomara medidas para ejercer control sobre la organización de ayuda exterior. Musk dijo que el presidente Trump había estado de acuerdo con el cierre y que cuando se investiga esta agencia es evidente que no se trata de una manzana con un gusano sino de "una bola de gusanos".

Mientras tanto Trump aseguró que la agencia "ha sido dirigida por un grupo de lunáticos radicales y los estamos sacando... y luego tomaremos una decisión". Por su parte, el secretario de Estado Marco Rubio dijo: "Mis frustraciones con la USAID se remontan a mi época en el Congreso. Es una agencia completamente indiferente, se supone que debe responder a las directivas políticas del Departamento de Estado y se niega a hacerlo".

¿Qué es la USAID?

Esta agencia fue creada en 1961 bajo la Administración del presidente John F. Kennedy y se encarga de administrar la ayuda internacional a diferentes países. Entre sus funciones está ayudar a combatir el hambre, dar ayuda a países devastados por guerras, organizar esfuerzos en contra del tráfico humano y combatir enfermedades como el VIH, entre otras causas.

En el año fiscal 2024 La agencia manejó un presupuesto de aproximadamente 44.200 millones de dólares. En 2023 el presupuesto fue de 50.300 millones de dólares. La agencia emplea a más de 10.000 personas, la mayoría de ellos trabajando desde el exterior.

Activismo LGBTI y otros gastos sin sentido

A lo largo de los años la USAID ha sido criticada por algunas de las financiaciones y proyectos que ha llevado a cabo alrededor del mundo. Donald Trump ha señalado que 100 millones de dólares manejados por USAID han sido destinados a costear condones en Gaza. Diferentes reportes han denunciado que los condones han sido utilizados por Hamas para construir dispositivos explosivos improvisados.

Entre 1995 y 1997 la USAID financió un programa de esterilizaciones forzadas en Perú. Diferentes informes han confirmado que la oficina en Lima de USAID, tras la firma de un acuerdo con el Gobierno de ese país, tomó el control del sector de salud durante los años en que ocurrieron esos abusos.

La agencia también ha financiado durante años la promoción de la “diversidad sexual" y el aborto. Durante la Administración Biden se autorizó a USAID entregar millones de fondos a organizaciones pro aborto como Marie Stopes International (MSI). Esta organización dijo durante la Administración Obama que USAID aportaba el 17% de sus ingresos totales de donantes.

La secretaria de prensa del presidente Trump ha dicho que entre los gastos de la agencia se encuentran: 1.5 millones de dólares para promover la "diversidad, equidad e inclusión" en los lugares de trabajo en Serbia. 70.000 dólares para la producción de un musical sobre “diversidad equidad e inclusión” en Irlanda, 47.000 dólares para una ópera transgénero en Colombia, dos millones de dólares para cambios de sexo y “activismo LGBT” en Guatemala y 32.000 dólares para un cómic transgénero en Perú.

El secretario de Estado Marco Rubio dijo este lunes sobre el manejo de la agencia: "Cada dólar que gastemos estará alineado con el interés nacional de los Estados Unidos. La USAID tiene un historial de ignorar eso y de decidir que son una organización benéfica mundial. No se trata de dólares de donantes, sino de dólares de los contribuyentes. Debemos garantizar al pueblo estadounidense que cada dólar que gastemos en el extranjero se destinará a algo que promueva nuestro interés nacional".

Este esfuerzo por modificar y reestructurar USAID hace parte de la promesa de Trump de reducir el gasto estatal y de las intenciones de Elon Musk de acortar de manera radical el tamaño del Gobierno y la burocracia. Aunque no es claro hasta el momento si la intención de la Administración Trump es eliminarla o solo reestructurarla, tanto Musk como el secretario Rubio ya están tomando medidas contundentes para cambiar el rumbo de esta agencia.

Si finalmente la Administración decide eliminar la USAID, Trump tendría que buscar la ayuda del Congreso, que al crearla le dio autoridades legales independientes, por lo que para disolverla como agencia independiente se necesitaría una nueva ley.